Los pilotos de carreras se ven sometidos a importantes fuerzas G, cada vez que pisan un circuito su cuerpo queda queda a merced de la gravedad: cuando aceleran, pasan por curva, deceleran, etc. Pero no hace falta ponerse el casco y el mono de carreras para experimentar esta sensación, basta con ir a un parque de atracciones y montarse en cualquier montaña rusa para sentir algo parecido a lo que experimentan los pilotos, al menos eso demuestran dos de los pilotos de Nismo en una curiosa comparativa.
Después de pilotar un LMP2 en las 24 Horas de Le Mans, los pilotos Jann Mardenboroug y Mark Shulzhitskiy, provenientes de la GT Academy, acuden a un parque de atracciones para comprobar qué produce más tensión, si montar en una montaña rusa o pilotar un coche de carreras, pero sobre todo, qué es más emocionante. Utilizan incluso sus teléfonos inteligentes como medidores de fuerzas G, para hacer más detallada la comparación y hablar no solo de emociones, sino también de datos. A continuación os dejamos los vídeos donde estos dos pilotos nos cuentan sus sensaciones:
