El la tecnología AMT (Air Maintenace Tecnology) de Goodyear plantea una auténtica revolución en el mercado. Este neumático auto-inflable promete solucionar un problema que repercute a todos los niveles en la conducción, sobre todo en la seguridad pero también en el consumo de combustible y la duración de la propia goma.
Ya en su fase final de pruebas, los técnicos de Goodyear han llevado el neumático AMT hasta las carreteras de Estados Unidos y Canadá, donde una flota de camiones se encargará de someterlo al máximo esfuerzo durante los próximos 18 meses de rutas diarias.
La marca espera que en 2016 esta tecnología esté lista para ser llevada a producción, de forma que los neumáticos de nuestros futuros turismos, cuenten con la posibilidad de inflarse por sí mismos en cuando detecten la más mínima pérdida de presión. Según los expertos, este factor causa un incremento notable en el consumo de combustible de los vehículos, algo que preocupa de forma especial a las empresas con grandes flotas. Tanto es así, que la Oficina de Tecnología de Vehículos del Departamento de Estado de Energía de los Estados Unidos, ha destinado 1,5 millones de dólares –1,17 millones de euros– para esta investigación, llevada a cabo en el Centro de Innovación de Goodyear en Akron, Ohio.
El sistema AMT funciona gracias a una bomba peristáltica que aprovecha la presión que ejerce el propio neumático sobre el asfalto, para regular el aire presente en la rueda. Este elemento se puede integrar perfectamente en el interior de cualquier neumático, ya que no requiere de adaptadores ni otros elementos externos, tal y como detalla el siguiente esquema.
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