La crisis provocada por la expansión del coronavirus ha provocado un mayor interés por estilos de vida donde la presencia en espacios abiertos sea una constante. El alquiler y venta de de autocaravanas se ha incrementado de forma exponencial al igual que la práctica del camping.
En este contexto las acampadas en el entorno de un circuito de velocidad no son algo anecdótico y muchos trazados cuentan con una zona específica. Es el caso del mítico Laguna Seca, en Estados Unidos, cuya área recreativa como la llaman sus creadores, permite disfrutar de multitud de experiencias, una de ellas fundamental para cualquier aficionado al motor que se precie. Se trata de acampar junto al mítico sacacarchos, la espectacular curva con desnivel del trazado.
Zona de pic nic
Según confirman desde el propio circuito, su área recreativa ha incrementado un 6% sus reservas con respecto a 2019, tanto de nuevos campistas como de aquellos que ya conocían la experiencia. En total el entorno de Laguna Seca ofrece 160 zonas en las que acampar, con barbacoas y picnic delimitado para autocaravanas.
Tal y como señalan desde la organización, mientras que en años anteriores el camping ha sido un complemento a las competiciones como tal, ahora la nueva dirección busca también crear experiencias cuando no hay carreras. Proponen actividades como rutas de senderismo o bicicleta.
El circuito está en un valle que permite contemplar unas vistas espectaculares, así como la abundancia de vida silvestre para los amantes de la naturaleza y los observadores de aves.
Tal y como explica John Narigi responsable de este proyecto, "El repunte en las cifras es la evidencia de la mayor atención al área recreativa Laguna Seca en su conjunto, y nuestra dedicación a mejorar la experiencia de los visitantes. Desde los anfitriones hasta el proceso de reserva y nuestra seguridad in situ las 24 horas, el objetivo es proporcionar una estancia excepcional".
