Daimler, casa matriz de la marca Mercedes, desea prolongar el contrato de Michael Schumacher más allá del final de este 2012, en principio fecha de caducidad del actual.

El heptacampeón volvió a la competición en 2010 de la mano de las Flechas Plateadas y desde entonces no ha vuelto a pisar el podio, pero eso no parece ser un lastre para la marca alemana, que entiende que tenerle dentro de sus herramientas de marketing, sigue funcionando y añade más que resta a pesar de lo abultado de su sueldo. Por ello, Dieter Zetsche, presidente del grupo afirma a la agencia DPA "Él sigue siendo el icono del deporte del motor".

De paso dejó caer un dato del que algunos observadores dudan, al afirmar que 'sólo' cuesta a las arcas del constructor siete millones de euros anuales.

Todo apunta que si Schumacher acepta seguir corriendo a sus 43 años, prolongará durante un tiempo indefinido, su actual contrato.