Tras completar las dos primeras sesiones de entrenamientos del Gran Premio de Malasia, la escudería Lotus ha decidido cambiar la caja de cambios del monoplaza de Kimi Raikkonen puesto que ésta quedó afectada durante el transcurso de la carrera australiana de Melbourne.

Concretamente, la transmisión sufrió problemas de sobrecalentamiento durante buena parte del pasado Gran Premio, ya que el finlandés se salió de pista y recogió restos que se acumularon en los radiadores de su monoplaza, lo que impidió la óptima refrigeración del mismo.

Ante la incertidumbre de un posible fallo mecánico, la formación de Enstone ha querido jugar sobre seguro. "Los mecánicos de Kimi tendrán un poco más de trabajo esta noche: hay un problema en su caja de cambios, ahora la estamos cambiando", ha anunciado la escudería a través de las redes sociales.

Puesto que toda transmisión debe durar un mínimo de cinco carreras, Kimi ha recibido una penalización de cinco puestos en la parrilla. Sin embargo, el finlandés no pierde el optimismo. "Tengo muchas ganas de correr aquí", ha dicho hoy. "Hay una pequeña mejora en la dirección; me siento bien en el coche en condiciones de calor. Espero que mañana hagamos algunos progresos pues el coche es más rápido de lo que hemos demostrado".