El Nürburgring atraviesa un profundo bache financiero. Bernie Ecclestone anunció hace unos días que el circuito no albergará el Gran Premio de Alemania en 2013 puesto que no puede permitirse pagar el canon que el magnate británico les pide. "Simplemente no tenemos dinero", explicaba el responsable del trazado.

La Comisión Europea investigará los fondos que el trazado germano recibió en marzo y ha anunciado que el capital que el gobierno local inyectó en las arcas del circuito a modo de rescate podría violar la legislación europea. Dicho rescate, valorado en unos 254 millones de euros, fue pagado por el Banco de Renania-Palatinado, controlado por el gobierno del estado.

Europa duda de que el Nürburgring sea una empresa viable. "Tenemos dudas de que las medidas se concedieran en condiciones de mercado y de que las empresas sean viables sin la ayuda continuada del estado", reza un comunicado. "La extensión de esta investigación en profundidad brinda la oportunidad a terceras partes de poder hacer comentarios sobre las medidas adicionales que se están tratando. No prejuzga el resultado de la investigación".

"La Comisión es consciente de que Nürburgring pudo ser una empresa en dificultades en 2008, cuando recibió una ayuda previa. Debido a los efectos altamente distorsionantes que producen sobre la competencia, los rescates o ayudas a la restructuración de una empresa en dificultades financieras únicamente son concedidos a una compañía una vez cada diez años".

"La Comisión investigará si esas repetidas intervenciones públicas están en línea con la normativa de ayuda estatal de la Unión Europea. La comisión considera que esas medidas adicionales están fuertemente relacionadas con otras medidas de ayuda que ha estado investigando desde marzo por la sospecha de que no fueron emitidas en condiciones de mercado", concluye.