Bernie Ecclestone tenía en mente celebrar dos carreras en Estados Unidos la próxima temporada, pero los planes para la organización de una carrera urbana con el 'skyline' de Manhattan como telón de fondo tuvieron que ser pospuestos hasta -al menos- 2014 debido a problemas financieros.

"Es un campeonato mundial, así que necesitas a Estados Unidos", admitió el empresario británico en declaraciones a la agencia de noticias alemana DPA."América es casi tan grande como Europa, así que deberíamos tener el mismo número de carreras (en cada una)".

En 2013, siete de los 19 grandes premios -España, Mónaco, Gran Bretaña, Alemania, Hungría, Bélgica e Italia- se disputarán en Europa, hogar por antonomasia de la F1. No obstante, muchas voces importantes del paddock han mostrado su alivio por que Estados Unidos haya regresado al calendario con al menos una carrera. Por ejemplo, Norbert Haug señaló esta semana que el país norteamericano es el mayor mercado de venta de utilitarios para Mercedes-Benz.

Sin embargo Ecclestone reconoció que su deporte "no es muy grande" allí. "Esta es una oportunidad de oro para que el deporte finalmente eche raíces y encuentre un hogar a largo plazo", opinó el jefe del equipo McLaren, Martin Whitmarsh.

Mientras, tras los retrasos acumulados en su construcción, el escenario del penúltimo Gran Premio de la temporada es un hervidero de actividad pocas horas antes de que el paddock cobre vida.Letreros y butacas, entre otros, aún se están colocando, tal y como admitió la portavoz del circuito texano, Julie Loignon: "El ritmo es frenético, pero todo el mundo está logrando mejoras continuas".

Por su parte, Michael Schumacher -un asiduo de Estados Unidos- ya he llegado a Austin y asistió al partido de NBA entre Dallas Mavericks y Minnesota Timberwolves, según el diario Bild.