No hay crisis económica para todos, especialmente para el comprador del Benetton B191 con el que Michael Schumacher logró sus primeros puntos en la Fórmula 1. Si el monoplaza iba a subastarse el sábado en el circuito de Nurburgring, un comprador privado se ha adelantado y ha pagado la friolera de 225.000 euros por el Benetton B191 que tendrá como nuevo hogar un museo que se está construyendo en Oriente Medio.
Quizá en euros la cifra no suene tan escalofriante pero cuando se traduce y el resultado da casi 38 millones de las antiguas pesetas, el valor económico se desborda. La subasta estaba programada para este sábado 10 de agosto en el 'infierno verde', organizada por la casa COYS, pero finalmente el bólido ha encontrado comprador antes de que se pujara por el precio del Benetton B191.
Dicho monoplaza tiene un valor sentimental incalculculable para los aficionados de Schumacher y los amantes de los coches históricos de la Fórmula 1. Al volante del monoplaza diseñado por John Barnard y Mike Coughlan, el Kaiser sumó sus primeros puntos en el Gran Circo gracias a la quinta posición en Italia y los dos sextos puestos logrados en Portugal y España en 1991.
Aunque el Benetton B191 tendrá su lugar en un museo de nueva creación, si su comprador quiere, puede participar en carreras de Fórmula 1 históricos ya que, aunque han pasado 22 años, sigue apto para competir gracias a que, además, viene equipado con repuestos e incluso un juego extra de neumáticos para que su nuevo dueño pueda tratar de emular al heptacampeón en sus inicios en el Gran Circo.
