El tema de los abucheos a los pilotos durante la ceremonia del podio después de completar una carrera no es la primera vez que se convierte en un asunto candente. Ya el año pasado, Sebastian Vettel recibió abucheos en repetidas ocasiones tras ganar diversas pruebas del campeonato y, en este curso, su compatriota Nico Rosberg ha sido el que se ha visto afectado por los mismos tanto en Spa-Francorchamps como en Monza.
Ante dicha situación, Toto Wolff ha recomendado que no se ataque a los pilotos durante la ceremonia de entrega de premios. El austríaco ha destacado que el deporte debería unir, pero las fuertes emociones que despierta en algunos aficionados lo hace complicado.
"No debería haber ningún abucheo en el podio. Se trata de los tres pilotos de cabeza que han tenido un mega carrera y quienes quiera que sean no deberían hacerlo. Esto es un deporte y el deporte debería unir. Pero todos los chicos tienen fans; algunos de ellos bastante emocionales".
Además, el director de Mercedes Motorsport ha recordado que ser el objeto de los abucheos es tremendamente duro y puede llegar a afectar mentalmente al piloto en cuestión. "¿Te hace daño eso? Sí, Así que creo que tienes que ser muy duro. No quiero ni pensar en ser abucheado, pero quizás es algo a lo que necesitas sobrevivir si quieres llegar a la cima".
No obstante, Wolff ha apuntado que Rosberg, el principal afectado por este asunto, es muy fuerte mentalmente, por lo que está preparado para esto. Tanto él alemán como Lewis Hamilton han debido tirar de fortaleza mental durante la campaña para recuperarse de tremendos varapalos.
"Creo que mentalmente es muy fuerte y si quieres ser un campeón del mundo tienes que superar altibajos. Lewis tuvo muchos de estos y regresó y ya hemos visto Nico tras Silverstone volvió. Se necesita fuerza mental extrema para llegar a la final y ganar el campeonato”.
En ese sentido, el ejecutivo de la marca de la estrella ha opinado que el incidente de Spa podría ayudar a no ver más irregularidades en las actuaciones de sus pupilos, pasando a hacer ambos fines de semana más homogéneos.
"Ambos se tienen a ellos mismos para recuperarse después de los fines de semana. Antes del incidente en Spa habían estado yendo hacia delante y hacia atrás. Uno tenía un buen fin de semana y el otro no, se pudo ver que ninguno de ellos tuvo un bajón después", concluyó.
