Max Verstappen ha rebajado la tensión con Toro Rosso y Carlos Sainz, después de que el piloto holandés se quejase durante el GP de Australia en numerosas ocasiones por radio debido la actitud del equipo y por no dejar adelantar al piloto madrileño en pista.

Así, el piloto de 18 años afirma que la carrera no salió tan bien como podría, aunque resta importancia a los comentarios posteriores que hablaban sobre una enemistad entre los dos pilotos del equipo de Faenza.

"La clasificación fue perfecta, pero la carrera no tuvo un gran final debido a algunos problemas de comunicación. Fuera de la pista toda va bien, por lo que no hay ningún problema y eso no me afecta. Creo que todo el mundo quiere batir a su compañero de equipo. No veo ningún problema," afirma tajante en una entrevista para Laureus.

Por otro lado, Verstappen reconoce que el equipo ha mejorado desde el año pasado, hasta tal punto que Williams aseguró que actualmente están por delante. Sin embargo, descarta emular a Sebatian Vettel en 2008, cuando el alemán obtuvo una impresionante victoria en Monza con el Toro Rosso; la única de los italianos hasta la fecha.

"Siempre sueñas con ello y tienes esperanzas, pero necesitamos mucha suerte para eso. Está algo lejos de nuestro alcance," concluye.