Al igual que las demás escuderías, los monoplazas de Ferrari tampoco han podido dar demasiadas vueltas en Shanghái para poder poner todo a punto. Tanto el líder del mundial, Sebastian Vettel, como su compañero Kimi Räikkönen se mostraban entristecidos por no poder salir a pista.

El alemán decía que era una "lástima, especialmente para la gente que ha venido a vernos. Estos últimos días ha habido muchos fans y muchos mensajes de personas que nos decían lo encantadas que estaban con el resultado de Australia". De cara a los Libres 3 y la clasificación el tetracampeón confía en que "tendremos los reglajes adecuados. Si no es así, será difícil. Aun así, me gustaría añadir que confío en que lo podemos hacer. Espero que mañana el tiempo sea mejor".

Por otro lado, Räikkönen era tajante: "Hoy no hemos aprendido nada. Después de la vuelta de instalación, volvimos a pista pero la sesión se interrumpió. Es una lástima. No puedes cambiar el tiempo y a veces estas cosas ocurren". A pesar de todo, el finlandés aseguraba que si hubieran "rodado lo habríamos hecho en lluvia y mañana las previsiones son otras. Tenemos que esperar y ver cómo será el tiempo, y entonces veremos cómo nos salen las cosas".