Ferrari rozó la pole con la yema de los dedos en el Circuit de Barcelona-Catalunya, aunque 51 milésimas impidieron que Sebastian Vettel pudiese arrebatarle la primera posición a Lewis Hamilton.

El piloto alemán cree que tenían el potencial para lograrlo, aunque un error en la chicane previa a la recta de meta podría haber comprometido su crono en favor del piloto de Mercedes.

"No sé cómo lo han hecho los mecánicos. Fue un gran trabajo. Quiero dar las gracias a todo el equipo. Esta mañana no pudimos hacer lo que queríamos. Conocemos la pista y el coche, y sé que funciona. Al final podríamos haber tenido la pole, pero perdí tiempo en la chicane. Entré un poco tarde y perdí tiempo. Tener el coche en primera línea es un gran éxito. Creo que trabajamos muy bien. Nos dimos cuenta de que había un problema y que podríamos arreglarlo. Mañana, con el ritmo de carrera, irá bien, porque, en cuanto entras en ritmo, es más fácil. Una buena salida siempre es bueno, por lo que vamos a ver, pero tengo confianza de cara a mañana y siempre trato de mantener la sonrisa", explica Vettel.

Por otro lado, Kimi Räikkönen ha lamentado no estar hoy al nivel de su compañero, aunque recuerda que, si toman las decisiones adecuadas, pueden hacer una buena carrera desde el cuarto cajón de la parrilla.

"El coche funcionó bien durante todo el fin de semana y estoy contento con ello, pero decepcionado con el resultado de la clasificación. Las condiciones de la pista fueron un poco complicadas, aunque mejor que ayer. Sentí que tenía mucha velocidad, pero tuve problemas y cometí pequeños errores, por lo que no tuve una vuelta perfecta. Mañana lo intentaremos de nuevo. Podemos hacer cientos de planes para la carrera, pero no hay garantía de que las cosas vayan como queramos. Conocemos las estrategias de los dos coches, pero no las del resto. Trataremos de reaccionar en el momento correcto y tomar las decisiones adecuadas. La distancia del DRS ha incrementado: no sabemos si será una gran diferencia, pero posiblemente ayude un poco", concluye.