Zak Brown desembarcó en la Fórmula 1 a finales de 2016 tras ser anunciado como director ejecutivo de McLaren, con la difícil tarea de sustituir a Ron Dennis, forzado a abandonar el equipo que él mismo había llevado a la gloria tras una serie de malas decisiones que hicieron que grandes accionistas del grupo se pusieran en su contra.
Lejos de la consideración de hombre de Fórmula 1, como Ron Dennis, Zak Brown era “nuevo”, pero era un hombre del motor, piloto y empresario de éxito, que había pasado gran parte de su vida compitiendo en calidad de ‘Gentleman driver’. No fueron pocos los que se preguntaron por la idoneidad de su elección en un mundo tan repleto de tiburones como la Fórmula 1, sin embargo, Brown se ha asentado en el Gran Circo.
Actuando siempre con franqueza y con decisiones que gustan a los aficionados y que muchos aseguran que Ron Dennis jamás hubiera permitido, Brown se ha ganado el apelativo de persona afable, fácil de tratar y que siempre tiene hueco para unas palabras.
Y con la franqueza que le caracteriza, Brown ha hecho balance de la temporada 2017, una temporada extremadamente difícil para el equipo por la falta de competitividad y donde pese a todo, el equipo no bajó los brazos y siguió trabajando para mejorar el vehículo. “La moral nunca bajó. Aquí estaban más frustrados que desmoralizados. Nunca se rindieron. La cantidad de desarrollos… el coche era más rápido según avanzaba el año, principalmente. El motor también mejoró, pero nosotros mejoramos como si estuviéramos compitiendo por el título. Esa fue nuestra mentalidad y nunca nos dimos por vencidos”, afirmó Brown en RACER.
“Aunque la moral fue buena, no hubo mucha emoción porque no había nada por lo que emocionarse. La emoción era baja porque nos íbamos y llegábamos a un nuevo fin de semana donde sabíamos cuál iba a ser el resultado. Era en plan ¿cómo de malo va a ser el próximo fin de semana? ¿Cuántas sanciones vamos a tener?”
“Así que la moral estaba alta, con un gran deseo de volver a estar en lo alto de la tabla, lo que al final ha hecho que todos tengan más hambre, y creo que eso deja a la organización en un buen lugar. Una McLaren realmente hambrienta es algo bueno.”
Brown también tuvo palabras sobre lo que ha supuesto el cambio a unidades de potencia Renault y cómo ha repercutido en el equipo. “La energía, el entusiasmo y la emoción están en su punto más alto de los últimos cinco años. La gente está trabajando duro, estamos emocionados. Tenemos nueva decoración, un nuevo garaje, llegará un nuevo motor, tenemos los pilotos que queríamos… El otro día le pregunté a Boullier si necesitaba algo más, y me contestó que tenía todo lo que necesitaba. Todos están entusiasmados y las expectativas están creciendo. Ojalá Australia fuese mañana.”, finalizó el de McLaren.
