El subcampeonato del Mundial de Constructores quizá no tenga mucho glamour. El propio Ron Dennis, ex jefe de McLaren, calificó al segundo como "el primero de los perdedores". Pero, en la práctica, luchar por ese puesto tiene mucho valor; concretamente, casi ocho millones de euros (diez millones de dólares), según informa el periódico británico The Sun, tal y cómo establecería el Pacto de la Concordia.

La escudería de Woking está sólo 14 puntos por detrás de Ferrari, segunda, en la clasificación provisional de constructores, a falta de sólo una carrera por disputarse, este fin de semana, en el Gran Premio de Brasil. Y desde luego no están los tiempos como para ponerse orgullosos y dejar pasar tal cantidad de dinero.

El propio piloto de McLaren, Jenson Button, reconoce que sería una buena ayuda para la escudería: "El Título de constructores significa mucho para mí, pues es mucho dinero. Creo que podemos hacerlo, pero necesitaríamos un fin de semana perfecto. También está bien terminar por delante de Ferrari; queremos terminar por delante de ellos. Somos un equipo competitivo. No podemos ganar a Red Bull, pero podemos ganar a Ferrari, y ese debe ser nuestro objetivo".