Durante esta temporada, los pilotos de Mercedes han tenido dificultades al comienzo de las carreras debido al nuevo embrague que implantaron en los monoplazas de la escudería germana para esta temporada. Son sólo ocho los puntos los que separan a Nico Rosberg y Lewis Hamilton en la lucha por el Campeonato.

A este último le preocupa especialmente el problema que tiene en el sistema de embrague, que puede decidir el final de las últimas seis carreras. Toto Wolff, jefe del equipo, está de acuerdo en que las salidas de sus pilotos no han sido tan buenas como deberían y en que ésta es la gran debilidad de la escudería, sin embargo, ha confirmado que no es un problema que puedan arreglar para lo que queda de temporada y que tendrán que contar con ello para las pruebas restantes del año.

En las últimas carreras siempre hemos tenido salidas que no han sido ideales. Es nuestro talón de Aquiles y no lo vamos a poder solventar este año. Tenemos que cambiar toda la estructura del embrague para el año que viene, porque en este momento es un gran problema para nosotros”, ha comentado el jefe de Mercedes para Sky.

Durante el comienzo de la temporada, cuando los problemas de embrague empezaron a hacerse significativos, Wolff aseguró que la empresa matriz de la escudería, Daimler, les ayudaría, pero ahora parece que las cosas han cambiado y no saben si el problema es de los monoplazas o de los propios pilotos.

No sabemos qué problema hay, si es del diseño de la construcción o de los pilotos que no saben operar con él. Hay muchos factores”, ha añadido el austriaco.