Haas fue la sorpresa del Gran Premio de Australia de la pasada temporada. El equipo estadounidense demostró que su buen ritmo en los test invernales no fue un espejismo y durante la carrera tanto Kevin Magnussen como Romain Grosjean rodaron en posiciones delanteras. El danés se encontraba en la cuarta posición y el francés era quinto hasta que llegó el desastre.

En apenas dos vueltas, el trabajo realizado por Haas se fue al traste debido a una rueda mal apretada en las paradas de Magnussen y Grosjean. Los dos pilotos tuvieron que abandonar la carrera nada más salir de boxes debido a las ruedas flojas en sus respectivos monoplazas, un problema que acabó con el sueño de Haas de conseguir el mejor resultado de su historia en Fórmula 1.

Para tratar de evitar que se repita esta pesadilla en 2019, Haas se ha centrado en mejorar las paradas en boxes realizando ensayos todos los días. “No nos hemos olvidado de lo que pasó en Australia el año pasado con los pit stops, que salieron mal. Esta temporada hemos puesto mucho énfasis en llegar preparados, explicó Gunther Steiner.

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Trajimos un coche de 2018 a nuestra fábrica en Italia para que pudiéramos entrenar todos los días las paradas. Hicimos lo mismo en Barcelona, ya que el monoplaza actual no siempre está disponible para realizar ensayos de paradas cuando estamos de test. Los mecánicos entrenaron alrededor de 10 a 12 pit stops al día, añadió el jefe de equipo de Haas.

Aunque Haas no impresionó tanto en los test de este año, Steiner se muestra satisfecho con las pruebas. “Los test fueron bien en general. Tuvimos algunos pequeños problemas que podemos solucionar antes de Australia. Obviamente, los test están para encontrar estos problemas y esperamos haberlos encontrado todos. Es muy temprano para decir cómo iremos en Australia, comentó.