Daniel Ricciardo y Max Verstappen se enfrentan este fin de semana a Spa-Francorchamps con la determinación de tener un "gran" fin de semana, ya que buscan mantener a su equipo Red Bull por delante de Ferrari en el Campeonato del Mundo de Constructores.

Verstappen ha hablado de inicio sobre estas semanas de vacaciones, unas muy necesarias tras acumular ya 12 GPs de manera bastante consecutiva e intensa: "Ha sido un parón bueno y relajante, tras un comienzo muy ocupado de verano. Pude pasar algo de tiempo con mi familia, descansar y divertirme un poco. Ir a Spa debería suponer un gran fin de semana, habrá muchos aficionados belgas y holandeses. Van a venir a una de las pistas más famosas del calendario y desde el punto de vista del piloto, es una de nuestras favoritas. Tuve allí un muy buen fin de semana el año pasado, así que espero que podamos tener un resultado aún mejor este año".

"Spa es la pista más larga que visitamos. Hice un paseo a pie por el circuito el año pasado y sentí su longitud por lo que seguramente vaya a ir en bicicleta este año. También el año pasado piloté en el circuito pero al revés para una demostración en vivo, sin duda fue interesante y bastante diferente. Ir cuesta abajo hacia Eau Rouge es bastante aterrador, las barreras no están hechas para esto y no muchas personas tienen la oportunidad de hacerlo así", ha confesado respecto al siempre complejo, rápido y muy técnico trazado de la pista belga.

Como el calendario 2016 no da tregua, una vez disputada la próxima carrera, no existe de nuevo los 15 días que normalmente hay hasta la siguiente. "Después de Spa-Francorchamps nos encaminamos directamente a Monza, lo que realmente es genial debido a la historia de ese trazado, además de ser una pista muy divertida de pilotar. Allí la comida es por supuesto la mejor del mundo. He pasado mucho tiempo en Italia, por lo que volver, comer algo de su comida local y ver algunos viejos amigos será muy agradable. Tengo ganas de volver", ha confesado.

Ricciardo, por su parte, también ha desgranado lo que hizo en estas tres semanas y media, lo vivido y sentido alejado de las pistas de competición. "Me pasé mis vacaciones de verano al sol de California. Fue realmente bueno, tengo algunos amigos allí y algunos compañeros cerca de casa también. Nos lo pasamos bien, no hablamos de carreras, así que simplemente, desconecté. Fue especialmente agradable ver a esos amigos de Perth, que sólo veo una o dos veces al año", ha destacado el australiano.

"Spa es genial y la pista increíble. Es histórica, rápida y fluida. Tuve una victoria allí hace dos años, por lo que siempre para mí ha sido un buen trazado para volver. Creo que es curioso lo extenso que es el circuito de Spa, por un lado se puede tener sol mientras llueve en otra parte del mismo. Siempre hay una gran cantidad de aficionados fieles, se les ve año tras año, así que es agradable ver a los verdaderos seguidores de la F1. Las patatas fritas y los gofres parecen ser la cocina local, aunque en realidad no es una dieta de carreras, pero su sabor es bastante bueno", ha señalado Ricciardo sobre lo que representa el conjunto de cosas del Gran Premio de Bélgica.

"Vamos hacia Italia después de Spa. Tienes el mejor lugar de pizzas del mundo, es genial y me encanta. Los aficionados en Italia son impresionantes, están locos por las carreras, además de ser muy apasionados. Me gusta la pista a través del parque, hay grandes carreras allí con un montón de oportunidades para adelantamiento", ha comentado sobre Monza.