Carrera complicada para Carlos Sainz en Spa-Francorchamps. El español cambió varios elementos de su unidad de potencia antes del Gran Premio de Bélgica, por lo que tuvo que salir desde la parte posterior de la parrilla. El madrileño adelantó varias posiciones para terminar 11º, aunque reconoce que volvió a experimentar problemas similares a los del sábado en clasificación.
“Hemos arriesgado saliendo con el medio, queriendo remontar en la primera parte de la carrera pero la rueda no ha llegado nunca a funcionar; perdía mucho tiempo en el segundo sector. Ha llegado a nublarse, las ruedas se han empezado a enfriar, el coche se iba más de morro… Sinceramente, tampoco teníamos mucho ritmo hoy, como ayer, en el segundo sector nos faltaba mucho. Desde la clasificación no he conseguido ir cómodo en el segundo sector y así es muy difícil remontar”, asegura Sainz a Movistar+ F1.
El piloto de 23 años reconoce que todavía deben mejorar en muchas áreas del monoplaza. El RS18 sufre en curva media-alta, y los neumáticos traseros se degradan más de lo que deberían. “Sigue faltando más o menos en todos los lados. Sobre todo en curva media-rápida nos faltaba mucho. Los demás equipos pueden llevar más carga, lo que les da más estabilidad y un mejor paso por curva. Quitar ala nos compromete la degradación, el calentamiento de las ruedas…”, continúa.
“Hay que esperar a circuitos mejores. El coche también tiene bastante por mejorar y la verdad es que este fin de semana no hemos ido nada bien con esta carga aerodinámica media-baja. Sabemos que es un coche muy inestable, que ataca mucho a las ruedas traseras y en un circuito de baja carga se sufre más", explica.
Sainz escaló varias posiciones desde la salida, aunque los neumáticos no jugaron a favor de los intereses del español y de su equipo. “He podido hacer una buena salida saliendo con la media. He pasado algunos coches en las primeras dos vueltas. Esperaba un poco más de esa rueda pero no me ha dado el grip necesario”, concluye.
