La llegada de Renault a McLaren está ayudando a la escudería a conseguir unos mejores resultados, comparados con los conseguidos cuando estaban motorizados con Honda. Han pasado ya siete carreras y están quintos en la clasificación. Estos resultados de McLaren han hecho que se planteen probar otras suerte en otras categorías.

El año pasado ya lo hicieron disputando las 500 millas de Indianápolis junto con Fernando Alonso y Andretti Autosport, aunque también sin encontrar mucha fortuna. Ahora están pensando en participar en toda la competición a tiempo completo. Incluso se han planteado también participar en las 24 horas de Le Mans.

Gran parte de esto se debe a que el piloto español quiere ganar y dentro de McLaren quieren hacer todo lo posible para que gane con ellos. Estas decisiones es algo que no está gustando a la anterior directiva de la escudería de Woking.

Martin Whitmarsh, antiguo directivo de McLaren pasó mucho tiempo dentro de la estructura de McLaren. Entró en el grupo en 1989 como jefe de operaciones y, durante 9 años, de 2004 a 2013 fue director ejecutivo de McLaren Racing. A la par que esto, llevó la gestión del equipo de Fórmula 1 desde 2009 hasta que Ron Denis le cesó para poner en su lugar a Zak Brown.

Whitmarsh cree que el equipo está perdiendo gran parte de su esencia. Centrarse en varias competiciones a la vez es algo que al ex dirigente de McLaren no le está gustando.

“Antes el equipo estaba centrado en ganar en Fórmula 1. Ahora están valorando otros horizontes, correr en Indianápolis o Le Mans por ejemplo. Son grandes cosas para ellos, pero que McLaren vaya en esa dirección en vez de centrarse en los grandes premios, me produce estremecimientos", asegura.

“Amo al equipo y me da muchísima pena ver en lo que se ha convertido”

Estas decisiones es algo que no solo disgusta a la antigua directiva, si no que dentro del propio equipo tampoco causa gran afición. “Vivo cerca y tengo amigos que trabajan en McLaren. Están decepcionados con lo que está pasando y me está protestando a mi”, explica.

Parece que, si desde el equipo se le precisa, Whitmarsh estaría dispuesto a volver a trabajar en McLaren.

“Si la delegación llama a mi puerta, no les echaré. Saben donde estoy”, sentencia.