Con una longitud de 4 metros y una altura de 1,60 el Venga fue uno de los primeros vehículos del mercado en integrarse en el segmento de los SUV urbanos. Automóviles que con una longitud comedida logran ofrecer una magnífica habitabilidad gracias a su génerosa altura y anchura, lo que los hace ideales para el uso urbano de una familia, sin renunciar a rutas de carretera con un comportamiento muy destacable.

Tras unos inicios comerciales exitosos, ahora ve como la numerosa competencia que ha llegado a ese 'nicho' de mercado le ha restado protagonismo, por lo que los responsables de la firma han llevado a cabo un trabajo profundo de actualización.

Delante salta a la vista el nuevo frontal que integra la parrilla delantera denominada Tiger Nose, que se caracteriza por la deportividad y agresividad. En la trasera nuevos paragolpes y grupos ópticos modificados –ahora de led– le aportan nueva personalidad al conjunto.Pero es en el interior donde los cambios son realmente importantes, con un nuevo salpicadero que integra las últimas novedades de la firma –como la gran pantalla de navegación de siete pulgadas– y unos materiales de acabado de inédita factura que se caracterizan por su comodidad y agrado al tacto.Del mismo modo ha sido completamente rediseñado haciendo hincapié en la funcionalidad, simplificando todo al máximo.

El interior mejora tanto en diseño como en la calidad percibida por los ocupantes

Las cotas de habitabilidad son correctas en todas las plazas y destaca un generoso maletero de 440 litros que puede variar su capacidad gracias a que las butacas traseras se deslizan hasta 13 centímetros para ganar espacio del portaequipajes.

Durante nuestra breve toma de contacto el Venga nos sorprende con una dirección y un cambio muy ágiles y muy rápidos en su respuesta. Sólo cabe criticar una sonoridad interior ligeramente elevada en el caso de los motores Diesel. Por lo demás destaca la calidad de rodadura, al mismo nivel de cualquier rival europeo. Nada que ver con los antiguos Kia, con unos tactos de conducción completamente 'amortiguados' que los hacían ideales para aquéllos a los que no les gusta conducir. Incluso la suspensión demuestra un tarado muy a la europea, pues pese a ser muy confortable se muestra ligeramente seca al paso por badenes o baches.

La gama de motores apenas varía, quedando compuesta por dos variantes gasolina 1.4 de 90 caballos y 1.6 de 124–este último completamente nuevo– y Dos opciones Diesel; 1.4 de 90 caballos y un 1.6 en variantes de 115 y 128 caballos.

En materia de acabados disponemos de los niveles Basic, Concept y Drive, con una serie especial de lanzamiento X-Tech sobre el 1.6 Driver de 128 caballos, que añade elementos como navegador de última generación, cámara trasera o tapicería de piel-tela mixta y ópticas traseras de LED.