Un empleado de la UTE Madrid Sur Movilidad está acusado de hacerse con un botín de más 45.000 euros moneda a moneda, tal y como desvela ElConfidencial.com. Su empresa cree que pudo trucar los parquímetros durante al menos dos meses, de modo que éstos no registraron la recaudación real de esos días, permitiéndole al ladrón llevarse un buen sobresueldo a casa.
De momento, la compañía adjudicataria prepara un informe con todo lo sucedido que enviará en breve al Ayuntamiento de Madrid y en el que se detallarán los hechos para corregir la debilidad informática de los terminales. "No podemos decir nada, el trabajador está denunciado y el caso está en los juzgados", explicó un directivo de Estacionamientos y Servicios.
Estos dispositivos informan a la UTE y al Ayuntamiento de todas las operaciones que se realizan: tickets emitidos, dinero recaudado y hasta el tipo de monedas. Sin embargo, el técnico encontró la manera de modificar estos datos intercambiando la placa que realizaba esta comunicación por otra que no lo hacía, de modo que el parquímetro seguía funcionando y recibiendo el dinero sin registrarlo. Durante unas horas, la caja realizaba no constaba en ningún sitio hasta que el empleado volvía a insertar la placa original para llevarse el dinero y volver a comunicar el parquímetro con la central.
El único rastro que dejaba su maniobra era la desincronizacion del reloj, algo que el propio técnico se encarga de ajustar de nuevo pero que terminó levantando las sospechas. Al parecer, este 'hacker de los parquímetros' era uno de los miembros más veteranos de la plantilla.
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