Cada vez que Koenigsegg anuncia un nuevo deportivo, la firma sueca se termina superando y eso que cada vehículo ofrece unas cifras difíciles de mejorar. El equipo de ingenieros de la marca hace una labor encomiable y uno de sus últimos logros reside en el propulsor de ocho cilindros que da vida a la bestia que todos conocemos como Jesko. Decimos esto porque, según las pruebas realizadas por el fabricante automovilístico, dicha unidad puede presumir de ser el motor que gira más rápido del planeta.
Una obra maestra de la ingeniería
Esta afirmación significa que el bloque V8 twin-turbo de 5.0 litros es capaz de ir desde el ralentí hasta las 7.800 revoluciones por minutos (el límite del vehículo en la posición N de la transmisión) en apenas 213 milisegundos. Dicho de otro modo, el motor en apenas un segundo sería capaz de alcanzar las 31.700 rpm, en caso de que fuera posible. Por si fuera poco, el ingeniero que habla con Christian von Koenigsegg, máximo exponente de la firma sueca, dice que han medido picos de más de 46.000 rpm por segundo cuando aceleran desde un punto de partida más alto.
“Cuanto mejor sea el número que pueda obtener, más control podrá tener sobre el automóvil, más directamente reaccionará a sus entradas. Y también significa que puede cambiar más rápido. Porque incluso si tiene una transmisión de cambio súper rápido, si tiene mucha inercia y una respuesta lenta en su motor, no reaccionará tan rápido entre los cambios de marcha y ralentizará ese proceso”, señala von Koenigsegg.
Koenigsegg Jesko - fotos
Por encima de los 1.500 CV
De hecho, la caja de cambios del Jesko se llama LST (Transmisión de Velocidad Ligera) y Koenigsegg afirma que es la más rápida del mundo. Diseñada específicamente para el hypercar sueco, no tiene un único embrague entre el motor y la propia transmisión, sino que usa unos discos más pequeños con una masa reducida que van integrados en la caja de cambios para permitir cambios sumamente rápidos (del orden de 20 a 30 milisegundos). Cuenta con nueve velocidades y su peso es de 90 kilogramos.
En cuanto a la bestia que impulsa al hypercar, hablamos de un V8 turboalimentado que es capaz de producir la friolera de 1.600 caballos de potencia y 1.500 Nm de par máximo, siempre que funcione con combustible E85. En caso contrario, el Jesko producirá 1.280 CV.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
