Si hoy nos desayunábamos con la propuesta de subir el Impuesto de Matriculación que recogía el borrador de la Ley de Eficiencia y Renovables, preparada por el Ministerio de Industria, esta tarde, tras las múltiples críticas recibidas desde las diferentes asociaciones automovilísticas de fabricantes y concesionarios, el ministro Miguel Sebastián da marcha atrás y, según afirma el diario El País, niega que esa propuesta haya existido. Según el mismo periódico, el cambio de parecer viene motivado por la oposición de Elena Salgado, quien desde el Ministerio de Economía ha informado de todos los posibles efectos negativos que conllevaría la modificación.
El anteproyecto de ley recogía en su Artículo 27 la “Modificación del impuesto sobre determinados medios de transporte” en base a la cual los tramos del impuesto de matriculación basados en las emisiones de los vehículos se endurecían.
Tan sólo los vehículos cuyas emisiones oficiales de CO2 no sean superiores a 100 g/km quedaban exentos, entre 100 g/km y 140 g/km, se fijaba el segundo tramos y entre 140 g/km y 180 g/km el tercero, asumiendo que de ahí en adelante todos los vehículos afrontaran el pago máximo, un 14,75%.
El borrador inmediatamente tuvo gran repercusión y asociaciones como Faconauto denunciaron enseguida que “debilitará aún más la demanda del mercado automovilístico de nuestro país, al reducir el número de modelos exentos de pagar este gravamen y por tanto frenar también la necesaria renovación de nuestro parque automovilístico.”
Vale la pena recordar que hace sólo una semana, la misma asociación se había dirigido a las Administraciones Públicas para pedir una bonificación del 50 % en el Impuesto de Matriculación para corregir la situación de descensos constantes desde hace diez meses en las matriculaciones de automóviles.
El Ministerio asegura que “la futura ‘ley de Eficiencia Energética’ persigue, en cualquier caso, fomentar la fabricación de automóviles con bajas emisiones de CO2 y en consecuencia, pretende aumentar la gama y el número de vehículos a disposición de los consumidores que estén exentos del pago del impuesto de matriculación”, queda por ver de qué forma se lleva a cabo.
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