Para evitar especulaciones de todo tipo, McLaren ha emitido un comunicado en el que aclara que sí, que varias unidades de su MP4-12C tienen problemas y que corresponden, principalmente a las primeras que salieron de la factoría inglesa de Woking. En el texto también se cita que estos problemas no tienen nada que ver con los últimos accidentes que han tenido varios propietarios del MP4-12C, que se deben a factores externos, como exceso de velocidad. Así pues, los fallos que los ingenieros están tratando de solucionar se encuentran en la centralita del motor (no se desconecta y ‘tira’ de la batería para alimentarse agotando así toda la energía de la misma, por lo que no se puede arrancar), un funcionamiento incorrecto de las puertas de tijera (no abren y cierran bien) y la aparición de vaho en los faros y los pilotos.

Para evitar que los problemas se sigan produciendo, McLaren han decidido ralentizar la producción del biplaza para solucionar estos quebraderos de cabeza y prevenir que sigan saliendo de Woking vehículos con fallos tan significativos en el cupé de 600 caballos.