El balance de Domenicali describe bien cómo están las cosas en la Scuderia: "La situación es muy sencilla. En este momento, en lo que respecta a Alonso este fin de semana, yo no creo mucho en la mala suerte, pero dos episodios así… es difícil tenerlos juntos. Ayer la bandera amarilla y hoy el contacto con Kimi… está claro que pesan por lo que hemos perdido respecto a nuestro principal adversario, pero es justo en este momento, cuando las cosas parece que van todas por el mal camino, cuando hay que mantener la calma, mantener la cabeza, hacia delante y mirar a la realidad a la cara con la máxima serenidad", han sido sus primeras palabras.
En cuanto a la evolución del F2012, asegura que en las últimas carreras sí ha habido novedades y achaca el pesimismo de Alonso al lógico acaloramiento producto de un abandono tan temprano: "Cuando escucho alguna vez que no estamos desarrollando el coche desde hace muchos Grandes Premios, no es verdad. La realidad es que el nivel de la competición es muy, muy alto y desde luego necesitamos mejorar el ritmo de calificación, que no está al nivel donde deberíamos estar", ha especificado. "Creo que debéis entender la frustración de Fernando después de un fin de semana tan difícil. El coche no es el mismo que hace seis carreras, porque de ser así estaríamos mucho más atrás, porque el ritmo de evolución de los otros coches es muy alto, ésa es la realidad", ha puntualizado. Más allá de las declaraciones literales, conviene matizar las palabras de Alonso, que difícilmente puede decir que el F2012 no ha recibido ninguna evolución cuando cada viernes de entrenamientos libres descubrimos piezas distintas montadas y embadurnadas en parafina. El verdadero sentido de las declaraciones de Alonso es que no han conseguido cerrar la brecha con los coches más veloces y que, por tanto, las evoluciones son insuficientes para afrontar con garantías el final del Mundial. Así pues, de alguna manera su discurso es compatible con el de su patrón.
Sobre la renovación de Felipe Massa, Domenicali ha dejado entrever que el acuerdo es inminente: "Pronto os lo diremos, no os lo decimos esta tarde, pero seguramente éste ha sido un resultado importante", ha dicho, en consonancia con las palabras de Massa en este mismo sentido.
Los buenos resultados empiezan a llegar para el brasileño, y así lo reconoce su jefe: "Con Felipe estoy muy contento, porque ha hecho una gran carrera. Debo decir que lo había demostrado durante todo el fin de semana, sólo había tenido esa vuelta en la Q2 con neumáticos blandos, que debemos comprender cómo no ha mejorado el tiempo marcado con neumáticos usados. Dicho esto, hoy ha aprovechado situaciones en las que ha aprovechado lo que ha sucedido en la primera curva. Ha atacado diría que muy bien. Al final hemos gestionado la ventaja sobre los de atrás, ya que no iba a alcanzar a Vettel y por tanto estoy muy contento por él, se lo merece, lo merece porque es un chaval que vive siempre bajo presión, y también lo merece el equipo después de lo que le ha pasado a Fernando, muy importante", ha sentenciado.
Massa ha firmado la mayoría de sus actuaciones destacadas de este año cuando Alonso se ha retirado, como en Bélgica y Japón, o cuando está más retrasado, como en Italia, pero Domenicali no cree que ésas situaciones puedan relacionarse: "No creo, también porque los pilotos son los dos de un equipo, no van por separado. Entiendo la sospecha pero ése sea el problema", ha dicho.
La estrategia que Ferrari debe seguir a partir de ahora está clara: "Entrar en pánico ahora no sirve absolutamente de nada, le hacemos un favor a nuestros adversarios, que hasta ahora han tenido un poco de suerte, y por tanto repito, desde un acercamiento mental, más allá de la desilusión que tenemos dentro de cada uno de nosotros y que durará algún día más, ya en Corea hay que dar la vuelta a las cosas, mirar hacia delante y forzar a tope. También porque hemos visto que las cosas cambian rápidamente de una carrera a otra", ha explicado.
"En este momento es absolutamente natural entender la frustación de Fernando en un momento tan difícil. Pero la fuerza de los grandes campeones y los grandes equipos es hacerle ver a los otros cómo reaccionar. Está aún delante, eso que le ha sucedido a él hoy le puede ocurrir a los demás y quien ríe hoy podría llorar cuando estemos más cerca del final del campeonato. Cuanto más tiempo pase, más necesitaremos demostrar la fuerza emotiva dentro de él para ser aún mejor en la forma de reaccionar a estas carreras que, debo decir entre Bélgica y aquí en Japón no nos han sido favorables", insiste Domenicali.
Las evoluciones son muy necesarias, pero sobre todo para ganar velocidad a una sola vuelta cronometrada: "Desde el punto de vista técnico, lo que debemos hacer es claramente mejorar el rendimiento en calificación, aunque más allá de lo que pasó ayer, porque la posición de ayer no era la que el coche demostraba, seguramente en el pasado sí hemos demostrado que éste es el punto débil sobre el que tenemos que mejorar. El ritmo en carrera que, por ejemplo, Felipe ha tenido hoy demuestra que en este aspecto las cosas están bien", continúa.
El derrotismo resulta estéril según el jefe de Ferrari, pese a la pequeña debacle de hoy: "Así pues, hay que ordenar todos los elementos, sin caer en el típico acercamiento itailano de 'todo va mal, esto es un desastre, no hacemos nada', así que calma y sangre fría", ha rematado Domenicali.
Vettel firma un Grand Chelem en el GP de Japón; Massa y Kobayashi completan el podio
