Fernando Alonso ha comparecido ante una abarrotada sala de conferencias en Monza en la posición que nadie quería ocupar: entre Nico Rosberg y Lewis Hamilton. El español ha tirado de humor para afrontar semejante reto pero las preguntas también han apuntado en su dirección, como cabría esperar.

Haciendo una comparación entre aquel 2007 en el que McLaren perdió el título en los últimos Grandes Premios por dejar luchar mano a mano a Lewis Hamilton y Fernando Alonso, el asturiano era preguntado al respecto y si veía similar dicha situación con la que los pilotos de Mercedes viven a día de hoy.

"Como he dicho muchas veces antes, no fue un problema con Lewis, teníamos una relación muy profesional y había gente muy competitiva dentro del equipo, eso era bastante normal", contestaba el de Ferrari. "Creo que en 2007 el equipo no funcionó como queríamos. No funcionó porque yo no estaba feliz con algunas de las filosofías y la manera de gestionar el equipo en ese momento, tenía más posibilidades de ir a otros equipos el año después y decidimos irnos de allí".

"Pero nunca tuve un problema con Lewis y no es sorprendente que hoy todavía tengamos una buena relación", continuaba el asturiano. Alonso también contestaba a la sugerencia de su utilización por parte de la FIA-FOM como agente de paz: "¡Sí!", bromeaba el piloto español. "No, definitivamente, no soy un embajador por la paz".

"Estoy seguro de que estos chicos seguirán adelante y, como Nico dijo, tienen un objetivo claro: ganar el campeonato, ambos dos", comentaba Fernando Alonso al respecto de la dura lucha entre los dos pilotos de Mercedes para lo que resta de temporada. "Están en una posición privilegiada para luchar por ese objetivo y desde fuera, trataremos de divertirnos lo máximo que podamos sin esa preciosa batalla. El deporte está hecho de este tipo de cosas. Ellos tienen un bonito problema, están luchando por el Campeonato del Mundo".