El presidente no ejecutivo de Mercedes, Niki Lauda, cree que la FIA no hizo nada mal en la gestión del Gran Premio de Japón tras el accidente del piloto de Marussia, Jules Bianchi. El ex campeón del Mundo cree que los organizadores la carrera podrían haber adelantado el comienzo del GP, como insistió la Federación durante todo el fin de semana. No obstante, el austríaco es consciente de que lo ocurrido fue resultado de las complicadas condiciones de una carrera disputada bajo la amenaza de un tifón, sin depender esto de la hora a la que se celebrara la prueba.

"Comenzaron detrás del coche de seguridad, no había nada malo. No puedes decir que hicieron algo mal. Empezaron de la manera más sensata y eso es lo que hicieron. Podrían haber empezado antes, de eso no hay duda. Se podía saber con antelación, podríamos haber empezado la carrera a la 1 de la tarde. Pero yo no tomo esas decisiones. Al final, habría sido mejor", comentó Lauda apoyando así la decisión de la FIA.

De todos modos, Lauda cree que lo que debería haberse hecho es sacar el coche de seguridad con el primer accidente, el de Adrian Sutil.

"El accidente de Sutil estaba fuera de los límites y en circunstancias normales no se discutiría y el coche saldría de inmediato. El lugar en el que aparcó el coche estaba muy cerca así que desde este punto de vista, la decision fue la correcta. Pero al final, estuvo mal", añadió.

Por su parte, el piloto de McLaren, Jenson Button tamién ha querido opinar sobre la actuación de la FIA respecto al pilotaje en estas condiciones. A su juicio, las acciones de la Federación fueron las adecuadas dado lo complejo de la situación a la que se enfrentaban.

"Creo que la FIA hizo un trabajo realmente bueno controlando la situación. Es tan difícil. Están escuchándonos a nosotros todo el tiempo. Queremos pilotar, pero queremos hacerlo de forma segura. Cuando no hay demasiado agua, estás casi listo para los intermedios. Creo que realizaron un muy buen trabajo para controlar la situación porque no es fácil para ellos", comentó el británico.

Además, Niki señaló que este accidente actúa como recordatorio de que la Fórmula 1 sigue siendo un deporte peligroso, un detalle que se suele olvidar hasta que pasan sucesos como éste. Es preciso recordar que el de Mercedes, en sus años como piloto en los que reinaba la rivalidad con James Hunt, vivió en sus propias carnes un incidente de alta gravedad que hoy se puede ver a través de las cicatrices de su cabeza.

"Los deportes de motor son peligrosos. Nos acostumbramos a ello cuando no pasa nada y de repente, todos nos sorprendemos. Pero siempre tenemos que ser conscientes de que las carreras son peligrosas y el accidente de hoy es el resultado de varias cosas diferentes. Un coche se sale, viene la grúa y otro coche se sale, fue bastante desafortunado. Podría aprenderse de hoy que en condiciones tan complicadas como éstas, en carrera, se podría haber actuado de forma diferente y hay más posibilidades de salirse de la pista", finalizó.