El Grupo de Estrategia de la Fórmula 1 se reunirá, este jueves, en París para discutir el tema que lleva persiguiendo tratar Bernie Ecclestone desde hace ya tiempo: las nuevas unidades de potencia de 1000 caballos para 2017. El jefe supremo del Gran Circo ha confirmado a la revista Forbes que la descongelación de los nuevos motores, que permitirá a los fabricantes desarrollar con mayor libertad su propulsores turbo V6 durante toda la temporada, no será suficiente.

"Es una buena unidad de potencia y una maravillosa obra de ingeniería, pero no está diseñada para la Fórmula 1", señalaba el periodista de negocios de este deporte, Christian Sylt.

En realidad, según las nuevas informaciones del medio italiano, La Gazzetta dello Sport, Ecclestone podría proponer un cambio a motores de 2,2 litros y V8 Bi-turbo. Sin embargo, otros podrán argumentar que la arquitectura de los actuales propulsores V6 es plenamente capaz de proporcionar los caballos que Ecclestone pretende.

Según el ingeniero jefe de motores de Fórmula 1 y campeón con Mercedes, Andy Cowell, con las actuales unidades de potencia se podría alcanzar este número de caballos. "La máxima potencia de los turbo V6, si llegamos a un cien por cien de su eficiencia, sería de 1630 cv. Esto sería la perfección, y es lo que estamos buscando", señaló Cowell a Speed Week.

Por otro lado, el presidente de la FIA, Jean Todt, ha confirmado que la cuestión de los motores será discutida en la reunión del jueves en París. "Personalmente, estoy abierto a cualquier sugerencia constructiva, pero con la condición de que se garantice la estabilidad en el reglamento. Si es posible aumentar la potencia del motor dentro de las normas vigentes, se podrá considerar como una evolución normal", señaló el francés para la web rusa, f1news.ru.