El Gran Premio de Austria volvió a deparar otro gran resultado para el equipo Mercedes, pues de nuevo, como pasara en Canadá, o en Barcelona, entre otros lugares de esta temporada, sus dos pilotos se colocaron al frente, no solo en parrilla, sino también al final de la carrera. Un gran fin de semana, que no obstante, no estuvo libre de errores, pues sus dos pilotos tuvieron unos problemas en las parada en boxes, con diferente resultado para ellos.

Por un lado, Nico Rosberg tuvo bloqueó sus frenos en la entrada a la parada, lo que le dejó muy cerca de exceder la velocidad, mientras que Hamilton, con peor resultado, cruzó la línea blanca a la salida de boxes, lo que le causó una penalización de 5 segundos al final de la carrera, que hizo imposible la ya de por sí complicada lucha por la victoria.

Dos maniobras, que según Wolff, demuestran el nivel de intensidad que vive el equipo esta fase de la carrera: "No pienso que estén sintiendo la presión por el resultado del campeonato todavía, pero están definitivamente empujando muy duro para batir a su rival. Difícilmente ves a alguien viniendo con humo después de bloquear sus ruedas en los pits, porque sabes muy bien que si pierdes la línea tienes una penalización, lo mismo que en la salida. Creo que este es el resultado de una batalla muy intensa entre ambos".

Wolff resaltaba la tremenda importancia que tenía esta acción en su lucha: "Lo que puedes ver es que él estaba empujando muy duro en la vuelta de entrada, como Nico, bloqueando los neumáticos. Si sabes que esta es probablemente tu única oportunidad de pasar a tu compañero tomas algunos riesgos, no solo yendo a los pits, sino también a la salida. Pienso que Hamilton pisó rápidamente acelerador para tener la mejor salida posible de los boxes para ir con Nico, así que cruzó la línea, y cuando te empujas tanto, estas cosas pueden pasar", ha concluido.