La Fórmula 1 parece estar condenada a tener que ver los mismos participantes en el podio todos los fines de semana de carreras, sean cuales sean las condiciones. A pesar de tener un guión altamente improbable ayer en Silverstone, el resultado final no varía de 'la costumbre'.

Muchas cosas han cambiado este fin de semana en la cuna de la Fórmula 1. Aunque todavía no haya habido ninguna carrera puramente sobre mojado esta temporada, en las últimas 10-15 vueltas del 925º GP de la historia se volvió a vivir ese hormigueo en el interior de cada fan pendiente a la incertidumbre de la situación.

Nico Rosberg demostró por primera vez en su carrera deportiva –me atrevo a apuntar- que puede ser campeón del mundo, que tiene madera. Y es que sólo un campeón se atreve a acelerar de la forma que el alemán lo hizo con neumáticos de seco (y con los duros, que se agarran un poco peor al agua que los blandos) sobre una Copse empapada.

Nico humilló a los Williams–aunque no pudo ni enseñarles el morro en seco- y después de comía a Lewis Hamilton, hasta que éste paró en busca de un juego de intermedios. La gran pregunta es ¿por qué Nico no ha competido así desde marzo de 2014? No cabe duda que si siempre mostrara esta actitud y tal maestría al volante, ya tendría una corona y estaría de camino a la segunda.

Es obvio, porque el que siempre actúa así en los momentos de tensión es el actual campeón, que busca su segunda corona consecutiva. Y es que Lewis Hamilton no pudo estar más acertado a la hora de cambiar de slicks a intermedios. Un acierto que remedia su pésima salida (igual de mala que la de Nico) y que le deja a 17 puntos por delante en el campeonato hasta llegar a Hungría.

Sin embargo, los verdaderos protagonistas del día son los Williams. Y es que como buenos ingleses, siempre optan por ser conservadores. Y en un deporte como el automovilismo, ser conservador pocas veces tiene premio (a la larga). Si no lo aprendieron perdiendo la Pole en Austria 2014, ayer tuvieron un segundo ensayo.

1º y 2º estaban los Williams en la primera curva. 4º y 5º después de 52 vueltas. ¿Cómo se pueden perder 21 puntos y una victoria en casa tan rápido? Por ser conservadores y no arriesgar ni en seco ni en mojado.

Para empezar, es lógico dejar pasar a tu piloto más rápido delante –Valtteri Bottas, en este caso-, y más cuando vas líder y quieres abrir hueco detrás. Gracias también al trabajo en equipo que le encanta realizar a Felipe Massa también, claro…

No vieron el clarísimo undercut de Mercedes en la parada desde el muro de Grove, ni el momento idóneo para colocar las gomas intermedias. Cualquiera de las tres jugadas anteriormente mencionadas le hubiera dado la primera victoria a Williams desde 2012.

Ferrari, sin ritmo pero con inteligencia, aprovecó muy agradecidamente el hueco en el podio que Williams no parecía querer, con un Sebastian Vettel que siempre tiene la caña lista, y que como él mismo dice: "sin la lluvia el podio no era posible".

La mala suerte vuelve a estar personalizada en forma de un 7 rojo, y Kimi Raikkonen era el verdadero propietario de ese podio (delante de Vettel todo el fin de semana, y en la misma carrera), aunque la lluvia le llegó demasiado tarde al finés y se tuvo que contentar con pocos puntos a final de carrera y caer en la clasificación general en favor de su potencial sustituto, Bottas.

La 'suerte' sonrió a Fernando Alonso en el GP local de McLaren, finalmente. No por un mísero punto que ni va ni viene, sino por volver a tener velocidad y algo –aunque poco- ritmo. Las caras cambiaban ayer en el garaje de Woking, por más del inicial abandono de Jenson Button en el choque entre ambos compañeros.

El largo camino hasta el tricampeonato del asturiano no tiene una forma clara, pero al menos si la fiabilidad vuelve a su sitio, la tarea se vería facilitada.

Por otra parte, Carlos Sainz Jr. no puede hablar de lo mismo, después de que su Toro Rosso haya tenido un error mecánico por enésima vez cuando el madrileño rodaba en zona de puntos y antes de que llegara la lluvia.

El otro español de la parrilla, Roberto Merhi, completó su mejor carrera en la Fórmula 1 con un 12º puesto muy meritorio para lo que supone su paupérrimo Manor. Paupérrimo en relación al claramente más avanzado motor y chasis de Will Stevens, que veía como Teto le clavaba tres segundos por vueltas en lluvia en su circuito local. Eso antes de que el británico rompiera el alerón de su auto.

Por otra parte, resulta prácticamente inexplicable que Nico Hulkenberg haya completado su carrera nº 85 en Fórmula 1 y aún no tenga ningún trofeo (ningún podio) en sus vitrinas. Es casi insultante para el automovilismo, y más aún de ver los malabares que tiene que hacer fin de semana tras fin de semana con su Force India, que poco a poco va recuperando terreno.

La suerte no estuvo de parte de los pilotos latinos ayer tampoco, ya que Sergio 'Checo' Pérez ha tenido que conformarse con 2 puntos después de haber estado por delante de Vettel en los primeros compases de la carrera. Más, al menos, que Pastor Maldonado. Dado que el venezolano se quedó en la curva 3 de Silverstone después de colisionar con el otro Lotus de Romain Grosjean.

Impactante resulta que un piloto como Marcus Ericsson aún siga en la Fórmula 1. Y es que aunque el Sauber no sea una delicia, el sueco no parece dar palo al agua en ninguna carrera, y ayer vio otra oportunidad frustrada de sumar puntos. Entre la falta de ritmo y la poca capacidad de manejar los neumáticos intermedios en condiciones seco/húmedo le ofrecieron dicha chance a Alonso, que tenía la misma dificultad.

Finalmente, cabe hablar de la paulatina recuperación de Red Bull. Ya que por mucho que Daniel Ricciardo haya tenido que abandonar, Daniil Kvyat escaló hasta la 6º posición final. Y después de haberle hincado el diente a Vettel durante parte importante de la carrera, le faltó una vuelta más al ruso para adelantar a Bottas.

Cabe destacar la buena actuación de la FIA –finalmente- ayer, por de poner en práctica un aún no perfecto Virtual Safety Car en un momento indicado, además de restringir los límites de la pista, ya que es de cajón no poder saltárselos.

Sin más historia, la Fórmula 1 desembarcará en el que muchos llaman "el circuito más aburrido del calendario", o también conocido como el Hungaroring de Budapest, en 3 semanas. Aunque sea un circuito bastante diferente y que presenta situaciones complicadas siempre, ¿podríamos adivinar quién estará en el podio? Probablemente estemos condenados a ello…