El equipo Williams llega al Gran Premio de Singapur conscientes de que las características del trazado de Marina Bay no se adaptarán a las características del FW37 aunque montarán novedades con las que esperan estar a la par con Ferrari y reducir distancias en la general del Mundial de Constructores.

Felipe Massa ha destacado lo complicado que es encontrar una puesta a punto perfecta en este trazado urbano, el cual será una de las carreras más difíciles para ellos y donde los neumáticos también se convierten en un problema para hacerlos trabajar de manera optima

"Es una carrera fantástica y me encanta visitar Singapur; la ciudad es increíble y la gente es muy amable. Hay un montón de fans apasionados por lo que espero que podamos ofrecer un buen rendimiento. No es fácil conseguir la puesta a punto perfecta y que los neumáticos trabajen en la ventana ideal de funcionamiento, y estos son los desafíos a los que nos enfrentaremos desde el inicio de la primera sesión. De las carreras restantes esta temporada, esta es probablemente la pista más difícil para nuestro coche, pero eso no significa que no podamos conseguir un buen botín de puntos", ha dicho el brasileño.

Por su parte, Valtteri Bottas ha coincidido con su compañero de equipo en que será un fin de semana complicado para ellos aunque espera con ganas reconocer el trazado para ver los cambios que se han hecho en él y los efectos que provocan en la vuelta.

"Singapur es un lugar muy chulo y bastante único, ya que se trata de una carrera nocturna. Al estar en el medio de la ciudad puedo caminar desde el circuito hasta mi hotel, eso es conveniente y se suma a la sensación del ambiente. Para los fans no hay nada más que querrían realmente, puedes ver la ciudad y las carreras desde todos en las proximidades. Para el equipo es una pista difícil, ya que hay muchas curvas con diferentes características que hace que sea difícil conseguir el equilibrio perfecto. El calor, la humedad y la intensidad de la pista también hace que sea muy exigente físicamente. Ha habido algunos cambios en el diseño de la pista este año, así que será interesante ver los efectos que éstos tienen".

Por último Rob Smedley, ingeniero jefe de rendimiento del equipo, ha señalado que pese a ser una carrera que representará un gran reto para ellos, el objetivo es lograr buenos puntos en Marina Bay.

"Tras un exitoso fin de semana en Monza, el equipo se dirige a Singapur con buen ánimo y la esperanza de conseguir algunos buenos puntos. Es un circuito urbano y una carrera nocturna por lo que plantea algunos retos muy importantes. Es un trazado muy largo, con 23 curvas que son un desafío para los pilotos físicamente, y también para los ingenieros, debido a su baja velocidad relativa. Comienza como un circuito de subviraje que evoluciona para incluir problemas con la degradación de los neumáticos traseros, lo que provoca problemas de tracción en la carrera. Las condiciones ambientales son difíciles igual de difíciles para los pilotos como para el equipo, ya que son horas de trabajo anormales a las que cada uno tiene que acostumbrarse. Ha habido algunos pequeños cambios en el diseño, pero los pilotos han trabajado en el simulador para entender esto. Singapur se ha convertido en una joya de la corona de la Fórmula 1, ya que personifica lo que nos gusta de este deporte", ha concluido.