Daniel Ricciardo y Max Verstappen son dos de los protagonistas del mercado de fichajes para 2019, donde competidores destacados como Lewis Hamilton también terminan sus contratos actuales. Ambos pilotos admitieron que podrían dejar Red Bull en caso de que el equipo austriaco no les pudiera proporcionar un coche ganador en 2018, posibilidad que parecía remota debido a los múltiples fallos de fiabilidad sufridos en el RB13 al principio de la temporada.

El rendimiento mostrado en las últimas carreras, incluyendo una victoria de Verstappen, parece haber animado a los pilotos a quedarse en la estructura a pesar de los rumores que les colocaban en Ferrari o Mercedes en el futuro. En este sentido, Christian Horner ha admitido que Red Bull está deseando mantener su actual alineación hasta 2020.

“A Ricciardo técnicamente se le acaba el contrato a finales de 2018 porque habrá completado su acuerdo de cinco años. Lo que está absolutamente claro es nuestra intención de mantener a ambos pilotos, diría que hasta 2020”, declaró el jefe de equipo de Red Bull.

En caso de que el australiano decida irse de la estructura austriaca, su sustituto podría ser Carlos Sainz. El madrileño ha sido cedido a Renault para la próxima temporada, aunque comenzará a pilotar para el equipo francés en el Gran Premio de Estados Unidos. Red Bull tiene derecho a recuperar a Sainz en caso de aparecer una vacante en el equipo principal, si bien esperan no tener que hacer cambios.

Queríamos mantener el contrato de Sainz en caso de que alguno de nuestros pilotos actuales no esté con nosotros tras el año que viene, pero la intención es que sigan Ricciardo y Verstappen en el equipo. Ambos disfrutan de estar en el equipo. Creo que la diferencia principal para Ricciardo es que por primera vez en su carrera en Red Bull, su contrato va a llegar a un fin”, explicó Horner.