Lewis Hamilton fue uno de los vencedores morales del Gran Premio de Mónaco. El piloto de Mercedes cruzó la bandera a cuadros en tercera posición, aunque mejoró notablemente el resultado del pasado año, donde sufrió para ser séptimo. Además, Vettel no recuera demasiados puntos en el Mundial y parece que el equipo alemán volverá a mejorar en circuitos más convencionales.

De todos modos, Hamilton sufrió en gran medida con los neumáticos en Mónaco. La degradación afectó a las gomas del británico y sus comunicaciones por radio fueron constantes durante toda la carrera. De hecho, llegó a decir que uno de sus neumáticos estaba apunto de “explotar”.

Daniel hizo un gran trabajo, estoy muy feliz por él, pero al final todos corrimos para asegurarnos de llegar al final. No se si fue emocionante. SI lo es, no hay problema”, afirma Hamilton.

Hamilton no paró de comentar el estado de sus neumáticos. El cuatro veces campeón del mundo sugirió hacer una segunda parada, pues la carrera se había convertido en una prueba de gestión para poder llegar al final, en lugar de una carrera de Fórmula 1.

“No creo que seamos capaces de mantener este ritmo en otro tipo de circuitos como Montreal o algo así. Me alegro de que traigan los hiperblandos de nuevo. Pensé que sería una carrera a dos paradas, pero finalmente pudimos controlar le ritmo, concluye.