Pese a haberse comercializado más de 1.000.000 de unidades en el mundo, el Optima es un modelo que ha pasado completamente desapercibido en nuestro mercado. La escasez de unidades disponibles para el mercado europeo ha sido una de las causas de que este vehículo pueda considerarse como un verdadero desconocido en España.
La completa renovación estética se aprecia en los faros más alargados hacia los pasos de rueda, la nueva parrilla y el paragolpes inspirado en el del prototipo Sportspace del Salón de Ginebra -que Kia finalmente sí producirá en serie como afirma en el comunicado de prensa-. En la zaga aparecen nuevos pilotos con ledes distribuidos en forma de halo y una defensa redefinida que variará según el acabado.
Nos llama la atención el incremento de cotas del modelo, alcanzando los 4,85 metros de longitud, hecho que unido a la ampliación de la distancia entre ejes, le permite ofrecer un habitáculo muy aprovechable para cuatro ocupantes y un maletero de 510 litros.
El Optima 2016 mide 4,855 mm de longitud, 1,860 mm de anchura y 1,465 mm de altura. La segunda es la medida que más ha crecido: la berlina gana 25 mm de anchura con respecto al modelo previo, lo que le concede mayor presencia y una apariencia de estilo ligeramente más deportivo. También se eleva 10 mm la distancia entre ejes hasta los 2.805 mm.
El habitáculo constituye el apartado más beneficiado por estas modificaciones. Hay espacio adicional para la cabeza -5 mm delante y 15 mm detrás-, los hombros -17 mm delante y 20 mm detrás- y las piernas -25 mm- y el volumen del maletero sube de 505 a 510 litros.
Nos llama la atención la mejora integral del interior. Podemos decir que el Optima ha entrado en la nueva generación de diseño y calidad que ya se inicio dentro de la marca coreana con el Kia Sportage. Los materiales son muy agradables, con plásticos mullidos de tacto muy suave y unos ajustes realmente milimétricos. Adicionalmente se han introducido nuevos materiales fono-absorbentes que lo hacen ahora mucho más silencioso.
Mecánicamente la evolución en el tren de rodaje ha sido muy importante, y ahora ofrece un comfort y una firmeza de rodadura a la altura de modelos referencia como el Renault Laguna o el Ford Mondeo. Atrás quedan los tactos mórbidos y las suspensiones rebotonas de los Kia pretéritos. Adicionalmente en un futuro contará con una suspensión de dureza variable opcional denominada –EDS– que pone a disposición del conductor un modo de firmeza sport y otro normal.
De hecho nos ha llamado especialmente la atención la doble personalidad que pone a nuestra disposición, con un guiado extremadamente firme, riguroso y preciso en autopistas–pero confortable con los ocupantes– y otro muy distinto en zonas de montaña, situación en la que nos ha sorprendido gratamente con unas reacciones rápidas y ágiles, un logro teniendo en cuenta su longitud.
Por el momento está disponible con un único motor turbodiésel de 141 caballos, evolución del anterior de 136, que ha visto incrementada su potencia y reducido su consumo gracias a ligeros retoques sobre el software. Nos ha gustado mucho la homogeneidad en la entrega de potencia, sin incómodos vacios en la zona inicial del cuentavueltas. Con un par motor de 34,6 kilogrametros a partir de 1.750 revoluciones, disponemos de empuje más que suficiente bajo el acelerador para adelantemientos e incorporaciones. Además tiene un consumo medio homologado de 4,2 litros a los 100 con cambio manual o de 4,4 para el automático.
Precisamente esta caja automática DCT es otra de sus novedades. Se trta de un cambio de doble embrague con un funcionamiento excepcional y un precio de venta de 2.000 euros.
De cara al futuro la gama crecerá con una variante familiar, se presentará en marzo de 2016, y con una espectacular versión GT de gasolina con 275 caballos que estrenará una imagen propia muy deportiva que dará origen a un acabado GT Line combinable con el resto de los motores.
La seguridad se refuerza con un mayor número de ayudas al conductor. En la lista que ha comunicado Kia, en la que no faltan imprescindibles hoy en día como el control de crucero inteligente o el detector de obstáculos en ángulos muertos, sobresale el sistema de frenada automática que ha diseñado Kia.
El AEB (Autonomous Emergency Braking) se desmarca de otros dispositivos similares por la mayor distancia a la que su radar puede identificar un peatón o un vehículo. La función City mitiga el riesgo de colisión a velocidades de hasta 50 km/h y la Urban incrementa el límite hasta 80 km/h -60 km/h en el caso de viandantes-.
Otra tecnología que hará despuntar al Optima 2016 en el segmento es un cargador inalámbrico de teléfonos móviles de 5 W. Consiste en una pequeña placa situada en la consola central que, emparejado con un detector de aparatos externos, alimenta la batería del móvil, siempre que este sea un modelo compatible -la marca no ha concretado qué marcas y modelos admite-.
El proceso de carga se proyecta en la pantalla del salpicadero y tiene un mecanismo para evitar que el móvil se sobrecaliente si se deja demasiado tiempo. La alternativa a este sistema son los puertos USB tanto en la parte delantera como en la trasera, para que así los pasajeros dispongan de sus propios métodos de carga.
Kia destaca igualmente el repertorio aumentado de Kia Connected Services del sistema multimedia. Los usuarios podrán acceder a nuevos servicios en tiempo real basados en tecnología TomTom como alerta de controles de velocidad, información meteorológica o tráfico en directo.
Como es tradición en la marca mantiene los siete años de garantía, e incluye opcionales tan exclusivos como un equipo de sonido Harman Kardon. La horquilla de precios está entre los 29.480 euros y los 39.330; respectivamente 21.700 y 31.550 euros con promociones.
