Los niveles de tráfico en las autopistas estatales de peaje no han parado de caer en los últimos años y antes de que subiera el IVA, en el primer trimestre del año, la media se ha situado en 43.451 vehículos diarios, un nivel que no se registraba desde 1998 y que se aleja notablemente de los máximos que se alcanzaron en 2007.
El Ministerio de Fomento ha hecho públicos los datos de Intensidad Media Diaria (IMD) en estas vías que reflejan una reducción del 8,2 % con respecto al mismo periodo de 2011 y más de un 28 % si se compara con los 60.706 vehículos que se contabilizaban de media hace cinco años, antes de que estallase la crisis.
La actual coyuntura económica, la existencia -en muchas ocasiones- de vías paralelas libres de peaje y el incremento de los precios de los carburantes, que actualmente se encuentran en máximos históricos, ha llevado a muchas autopistas de peaje al borde de la quiebra al no poder soportar tanto la caída del tráfico como el sobrecoste asociado a las expropiaciones.
Entre las autopistas de peaje que afrontan serias dificultades económicas se encuentran las radiales de Madrid. En este sentido, la que discurre entre Madrid y Guadalajara (R-2) vio reducido su tráfico un 22 % el primer trimestre, la que va desde Madrid a Navalcarnero (R-5) un 16 %, la que conecta la capital con Arganda (R-3) un 15 %, y la que cubre el trayecto entre Madrid y Ocaña (R-4) un 10,6 %.
Por su parte, otra de las autopistas de peaje con dificultades económicas es la AP-41, que une a Madrid con Toledo y que solicitó en mayo el concurso de acreedores. En su caso el tráfico descendió un 16 %, mientras que la intensidad media diaria de la autopista murciana Cartagena-Vera se redujo un 6 %.
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