No cabe duda de que el equipo Ferrari está inmerso en una etapa de cambios dentro de su organigrama interno. Las llegadas de Sebastian Vettel y Maurizio Arrivabene son las cabezas más visibles de un nuevo proyecto que intentará relanzar a la formación italiana hacia los puestos de cabeza.

Curiosamente, Kimi Raikkonen es uno de los que menos dudas parece tener respecto a este camino iniciado por su actual escudería. El piloto finlandés ha asegurado que de cara a 2015 espera una gran mejoría de la escuadra transalpina, ya que en el pasado, tanto esta como él mismo, se han recuperado de temporadas complicadas. Además, de este 2014 el nórdico ha afirmado que se pueden sacar aspectos positivos.

"Siento que los cambios que se han hecho dentro del equipo van a hacer una gran, gran mejora. Es una cosa desafortunada que tuviéramos este tipo de año, no es bueno para mí y no es bueno para Ferrari, pero eso es parte del juego. No es la primera vez que tuvimos un año difícil y tienes que quedarte con las cosas buenas de esto y asegurarte de que las cosas no pasan de ese modo en el futuro. Hay muchas cosas buenas que llevarse, pero obviamente el resultado es malo. Eso es lo que pasa".

Tras las múltiples dificultades atravesadas durante el curso, Raikkonen ha asegurado que de esta campaña se esperaba algo similar a lo que se ha visto en pista, ya que ha padecido de ciertos problemas con el coche que han imposibilitado su total entendimiento del F14-T.

"Esperaba que fuera difícil porque sabía cómo funcionan las cosas si el coche no se adapta a ti… Antes tuve una situación similar con Ferrari un año. No es fácil cambiar las cosas cuando ciertas cosas no están bien para ti, pero seguimos aquí y tenemos un plan claro de qué tenemos que mejorar y de devolver a Ferrari a donde debería estar", concluyó.