La jornada de sábado en Australia amanecía con la noticia de que Giedo van der Garde había renunciado a su derecho para correr el Gran Premio de Australia y, a partir de ahora, continuaban las conversaciones entre ambas partes para alcanzar un acuerdo equitativo.

En lo deportivo, se confirmaba que McLaren había utilizado ya uno de sus comodines para romper el toque de queda en el paddock y así trabajar en el MP4-30 durante toda la noche. Además, el equipo Red Bull cambiaba la unidad de potencia en el monoplaza de Daniel Ricciardo tras sus problemas en los Libres 2 con el agravante de que es irrecuperable, por lo que el australiano sólo tendrá tres unidades de potencia para lo que resta de temporada, algo que no le pasará a Felipe Massa, que aunque también la ha cambiado, sí que podrá ‘reciclar’ para cualquier otro momento del año.

Con estos ingredientes previos arrancaban los últimos entrenamientos libres de este Gran Premio de Australia, en el que Manor volvió a quedarse en el garaje con sus problemas de software y en los que Lewis Hamilton ha estado muy por encima con su Mercedes y el neumático blando.

El británico ha sidoe el único en bajar del 1:28 en la sesión, donde se han visto simulaciones de Q3 por parte de todos o casi todos, porque Nico Rosberg ha realizado su vuelta con un coche algo más pesado y que podría estar probando otro tipo de cosas. Muy bien Ferrari, sorprendente el equipo Lotus, Carlos Sainz en sintonía con el STR10 ha marcado un buen tiempo en la segunda vuelta con el blando y, en la otra cara de la moneda, continúan los problemas para McLaren y Red Bull, que siguen en caída libre.

Los primeros en marcar un crono en este jornada fueron los dos hombres de Sauber, que aguantaban en pista tras sus vueltas de instalación en busca de recuperar los kilómetros perdidos el viernes por su ausencia en los Libres 1.

Por su parte, Ricciardo también salía rápido a pista para chequear sistemas tras su cambio de unidad de potencia mientras que su compañero comenzaba la sesión con un gran bloqueo de frenos que machacaba sus neumáticos y hacía negar con la cabeza a Christian Horner ante las cámaras en el muro del equipo.

Los tiempos mejoraban vuelta a vuelta en un ajetreo constante en pista con los equipos que aprovechaban al máximo esta hora de entrenamientos. Lo hacían todos salvo Manor, que confirmaba en su cuenta de Twitter que continuaban con problemas pese a haber avanzado durante la noche y no rodarían en los Libres 3 lo que, en teoría, les impediría rodar en la sesión de calificación si lograsen solucionarlo todo al no haber rodado en ningún entrenamiento libre en Australia.

Cumplidos los primeros 40 minutos de sesión, los pilotos más activos regresaban a sus garajes y la pista se quedaba en silencio, una pista en la que los grandes como Mercedes, Ferrari o Williams tan sólo habían dado sus vueltas de instalación al comienzo de la misma.

Sería Kimi Raikkonen el primero de los importantes en volver a pista para sus primeras tandas de la jornada a los mandos del SF15-T y pronto le seguirían Jenson Button y Nico Rosberg. El alemán, con el coche cargado, no tardaría en colocarse en cabeza con una facilidad pasmosa y como el único por debajo del 1:30. Tras él se situarían Bottas, Vettel, Raikkonen y Massa en el top cinco.

Acercándonos al ecuador de la sesión, Daniel Ricciardo se quedaba parado a la salida del pitlane con nuevos problemas en su RB11. Le devolvían rápido al garaje y pronto regresaría a pista tras solucionar lo que estuviese mal.

Fue entonces cuando Lewis Hamilton, a 23 minutos para la conclusión, apretaba los dientes y bajaba hasta el 01:29.128 para colocarse en cabeza por delante de su compañero de equipo. Todos los cronos se habían marcado con neumático medio salvo el de Magnussen, que ocupaba la 18ª posición y lo había marcado con el medio montado en su MP4-30.

A 17 para la conclusión, Marcus Ericsson perdía el control de su monoplaza al acelerar sobre el astroturf en la curva 12 y trompeaba con suerte al no tocarse con el muro. Regresaba al garaje para realizar ajustes y cambiar neumáticos.

El neumático blando aparecía en pista para los últimos diez minutos de sesión, donde Nico Rosberg recuperaba la primera plaza en una vuelta aún con el coche cargado pero que le servía para superar a Lewis Hamilton.

Tras el alemán, llegarían posteriormente los demás hombres importantes para mejorar sus cronos en verdaderas simulaciones de Q3. Sólo le superarían un intratable Lewis Hamilton con un 01:27.867 seguido de Sebastian Vettel a casi 7 décimas. Tras ellos el propio Rosberg, Raikkonen, Grosjean, Ericsson, Pérez, Nasr, Maldonado y Massa que completaban el top ten de una sesión en la que preocupaban los tiempos del equipo McLaren y los problemas mecánicos de Red Bull.

Como detalle, Lewis Hamilton venía mejorando su propio crono a dos minutos del final pero ha decidido esconder sus cartas y ha regresado al garaje demostrando una vez más la superioridad del conjunto alemán en cualquier condición. Así, quedaba todo emplazado para una sesión de clasificación en la que entrar en Q3 iba a estar muy reñido con mucha igualdad en la zona media de la parrilla y en la que, finalmente, no estarán los hombres del equipo Manor.