Daniel Ricciardo, piloto oficial de Red Bull, no teme que su equipo pretenda abandonar la Fórmula 1 y todavía confía en que se encontrará una solución.
Dietrich Matestchitz, el propietario de la marca Red Bull y, con ello, de los equipos Red Bull y Toro Rosso, está preparado para retirar a ambas escuderías si no encuentra un motor competitivo para 2016.
Esto llega tras la decisión de terminar su contrato con Renault antes de lo previsto, de que Mercedes rechazase motorizarles y, por último, de que Ferrari les ofreciese sus motores pero únicamente una versión B menos potente que la que utilizarán en la Scuderia..
Pese a todo Daniel Ricciardo, ganador de tres Grandes Premios en la categoría reina, cree que finalmente se llegará a una solución a tiempo.
"No tengo miedo, tengo esperanza", ha dicho a Autosport. "El equipo quiere correr, queremos ser competitivos, es cosa de ellos dar el paso adelante. Quieren estar en la parrilla, ambas escuderías, por los números y por el deporte", ha proseguido.
"Solo tenemos 20 coches, por lo que quieres ver todos los sitios llenos, es bueno para el deporte que nos quedemos en la parrilla y que seamos competitivos. Es por esto que tengo esperanza en que estaremos en la parrilla".
En el caso de que el año que viene Red Bull sea motorizado por Ferrari, Ricciardo comentó que los equipos rivales deben enfrentarse a Red Bull en una lucha directa.
"Probamos en Singapur que nuestro coche es bueno", ha comentado, haciendo referencia a la primera línea que consiguió en la clasificación y el segundo puesto final en carrera en el circuito urbano de Marina Bay.
"Si conseguimos más caballos de potencia estaremos más arriba en la parrilla. Eso es lo que queremos, nuestros competidores deberían estar alegres por el desafío", ha concluido.
