El director técnico de Toro Rosso, James Key, admite, que al coche de 2016 sí que le ha afectado el hecho de que se confirmara tan tarde la unidad de potencia que llevaría. De acuerdo con el británico, la incertidumbre retrasó los planes técnicos.
"Sí y no, porque cuando tienes una situación de motor complicada es siempre un compromiso", asegura Key para Sky Sports.
"Hay un compromiso porque realmente tienes que mejorar tu coche en medio de toda esta increíblemente complicada instalación de estas unidades de potencia. Es en marzo cuando realmente te das cuenta lo que estás intentando hacer, así que simplemente es un pequeño retraso a nivel técnico. En términos de lo que hace el equipo, no creo que supongo diferencia alguna. Simplemente cambias los planes sobre la marcha", añade.
Aunque Key confía en que Toro Rosso pueda construir un coche sólido, admite que la confirmación tan tardía es "una gran distracción para el equipo". "Tenemos varias etapas de planes, hay hombres realmente buenos que trabajan en todo esto así que tenemos mucho personal competente de producción y diseñadores que trabajan duro para asegurar que estamos en la mejor forma posible. Nunca quieres que pase esto porque es una distracción enorme y afecta a tu coche, pero es sorprendente lo que puedes hacer cuando reina la incertidumbre", finaliza Key.
La incertidumbre hasta última hora sobre el motor 2016 marcó a Toro Rosso
James Key, director técnico de Toro Rosso, reconoce que sí que les afectó que no se supiera que llevarían motores Ferrari en 2016 hasta última hora. El británico explica que lo tarde que se anunció la decisión repercutió en un retraso en el desarrollo del coche de la campaña que está a punto de empezar. No obstante, esperan construir un monoplaza sólido.
Por Ana Vázquez
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