Hace más de una década, el grupo Nissan-Renault inició una andadura en solitario, tan clara como ambiciosa: desarrollar y comercializar los primeros eléctricos de gran volumen del mercado europeo. La bandera de aquel gran cambio para la marca del rombo se llamó Renault Zoe y ahora sigue siendo el modelo estrella de su incipiente gama de cero emisiones, compuesta también por los Twiyz, Kangoo y Master. Eso a día de hoy porque en 2022, el 50% de los coches de la marca del rombo estarán electrificados.

Renault Zoe 2020 - trasera
Renault//Car and Driver

Renault ha destinado nada más y nada menos que un billón de euros para que así sea y buena parte de esa inversión se deja notar en nuestro protagonista desde el primer contacto. Visualmente, el Zoe se aprecia un punto mas atlético y sofisticado. Los principales responsables son sus faros y pilotos full led, ambos de serie. Los primeros suman unos antiniebla pequeños pero vistosos en su parte inferior –con la misma tecnología– y los segundos cuentan con unos intermitentes dinámicos a la última. Pero por supuesto, hay mas: la nueva parrilla resulta es más vistosa, los paragolpes robustos y la rejilla inferior, con el de diseño tridimensional que han incorporado los últimos Renault, añade un extra de encanto a un vehículo más atractivo en líneas generales.

Gran salto... ¿generacional?

Estaríamos ante un perfecto restyling de no ser por los numerosos cambios introducidos tanto en la plataforma mecánica como en el motor y la batería de este Renault Zoe 2020 que le permiten a la marca hablar de nueva generación, la 'tercera' a su juicio porque del modelo de 2012 al de 2016 existieron diferencias igualmente notables. Así, hablamos de un coche que cuenta básicamente con el mismo chasis y una carrocería muy similar al primer Zoe aunque se siente realmente distinto. Sus 4,08 metros de largo, 1,73 de ancho y 1,56 metros de ancho, son calcados al modelo anterior aunque pesa 45 kilos más: 1.502 en orden de marcha, para ser exactos.

No ha variado sus dimensiones pero pesa más por la mayor carga tecnológica.

La clave es su batería, de tipo ión-litio que es mas grande y capaz. Añade 20 kilos extra a cambio de alcanzar los 52 kWh y su rendimiento es crucial para disparar las prestaciones de este modelo. Pero antes de hablar de las bondades mecánicas del nuevo subcompacto eléctrico de Renault, es importante destacar su evolución en el habitáculo donde se han introducido nuevos materiales aislantes y un equipamiento tecnológico avanzado, los otros grandes responsables de ese aumento del peso.

Renault Zoe 2020 - lateral
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Cómodos, como en el Clio

La primera sensación al acceder al interior de este Zoe es que tiene poco o nada que envidiarle al modelo con mecánica convencional de este mismo segmento que comercializa Renault en estos momentos, es decir, el nuevo Clio. De hecho, destaca incluso por ofrecer algunas ventajas importantes. La primera es que cuenta con cinco plazas reales, las delanteras muy amplias –aunque con asientos sin regulación de altura– y las traseras más prácticas que la media de este segmento.

Renault Zoe 2020 - interior
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El acceso a las mismas es cómodo debido a la amplia apertura de las puertas y también a la disposición de la banqueta, bastante plana y elevada porque –recordemos– bajo la mismas se encuentran las citadas baterías. Solo una manecilla demasiado oculta y pequeña hace menos agradable la experiencia pero una vez dentro, hasta la central cumple para un adulto, siempre con las lógicas limitaciones de anchura y altura que se dan en un coche de este tamaño.

Renault Zoe 2020 - maletero
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El complemento perfecto lo pone un maletero generoso, de 338 litros, ampliables a 1.225 plegando los respaldos de estas plazas traseras. Da de sí, presenta un buen acceso y solo el plano de carga queda algo más elevado de lo deseable y además su fondo tampoco esta enrasado. Bajo el mismo, los cables de carga encuentran un espacio muy apropiado.

Renault Zoe 2020 - asientos
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No menos llamativo resulta el hecho de contar con un habitáculo bien acondicionado, con una insonorización notable, un equipo multimedia a la última –con cuadro de mandos digital de serie, una pantalla táctil vertical de hasta diez pulgadas y cargador inalámbrico para el móvil– y una vistosa tapicería en el salpicadero, los paneles de las puertas, los asientos y otras pequeñas superficies que está compuesta únicamente de materiales reciclados como cinturones de seguridad o diferentes plásticos.

Con chispa, de verdad

Bien acomodados en este interior, nos encontramos con una novedad todavía más reseñable: un selector de marchas compacto, ergonómico y de funcionamiento 100% electrónico. Desde éste podemos elegir entre marcha atrás, punto muerto, directa y un inédito modo 'B' que nos permite incrementar la retención del motor en marcha e intensificar su frenada regenerativa.

Renault Zoe 2020 - en curva
Renault Zoe 2020//Car and Driver

Con un solo clic, saltamos de un modo de conducción al otro instante, mientras que un botón ECO, instalado en el salpicadero, permite añadir un programa todavía más conservador, con el que el ZOE no pasa de los 100 km/h a menos que aceleres a fondo para salir de algún apuro. Durante esta primera toma de contacto, solo condujimos este modelo con su nuevo propulsor, de 135 caballos de potencia y 245 Nm de par máximo si bien el básico, de 110 CV y 225 Nm, estará igualmente disponible en la gama de este modelo con la misma batería –de 52 kWh– pero con unas prestaciones más discretas.

Así se explica que el nuevo Zoe ofrezca en sus dos variantes, denominadas oficialmente R110 y R135 la misma autonomía: 395 kilómetros, una cifra especialmente considerable si tenemos en cuenta que ha sido lograda bajo el estricto criterio WLTP, no como antes. De hecho, durante nuestra ruta por las sinuosas carreteras de Cerdeña, pudimos comprobar que el alcance de este pequeño eléctrico es realmente elevado. Durante casi 300 kilómetros, solo empleamos el 70% de su carga y eso que realizamos varias aceleraciones intensas y subidas de montaña con el acelerador a plena carga.

Lo que pueden echar en falta algunos usuarios son recargas más rápidas para sus baterías. En una toma doméstica, de 7 kW el Zoe requiere una noche completa –9 horas aproximadamente– para cargar sus pilas mientras que en una estación pública con 22 kW en una hora ganará 120 kilómetros de autonomía. La opción más rápida pasa por un poste de 50 Kw que en 30 minutos es capaz de dotarlo con 150 km de recorrido extra.

La carga más rápida que soporta son 50 Kw. Con esa potencia, en 30 minutos gana 150 km de autonomía.

Esta fue una de las más gratas impresiones que nos dejó nuestro reencuentro con el Zoe, pero no la única. El salto de calidad y sobre todo de insonorización que ha dado el habitáculo es notable, solo empañada por algunos ajustes que siguen siendo mejorables. Con todo y eso, el nivel de confort es apropiado en todo momento y a ello contribuye también una suspensión con mayor capacidad de amortiguación que antes, que sujeta con firmeza la carrocería pero que es capaz de filtrar la mayoría de los imperfectos de la carretera.

Este chasis, más propio de un compacto versátil que de un coche 100% urbano es otra de las cualidades más destacadas del nuevo Zoe. Estamos ante un automóvil que marcha bien aplomado en carretera, donde resulta estable y suficientemente ágil. De hecho, pese al incremento del peso, el centro de gravedad se ha mantenido muy bajo algo que se agradece y mucho en curva. La dirección, en cambio, no es todo lo comunicativa que nos gustaría, pero sí resulta rápida y en cuidad agradecemos su ligereza.

renault zoe 2020   carga batería
Renault//Car and Driver

Las prestaciones oficiales de este motor revelan un 0 a 100 km/h en 9,5 segundos y su velocidad punta sigue estando autolimitada a 140 km/h para salvaguardar la carga de la batería. Pero este Zoe responde mejor lo que crees al acelerador, sus primeros metros desde parado son rápidos y en recuperaciones, es capaz de pasar de 80 120 km/h en dos segundos, un dato que hace mayor justicia a las sensaciones experimentadas en él.

En definitiva

Con el objetivo de afianzar su liderazgo, Renault lanzará este nuevo Zoe en noviembre aunque sus primeras unidades no llegarán hasta enero de 2020 y con unos precios que no serán demasiado distintos a los del modelo actual, es decir, superiores a los 25.000 euros pero en ningún caso por encima de los 28.000. Esta cifra puede reducirse notablemente con las ansiadas ayudas a la compra de estos coches de cero emisiones por parte del gobierno, si bien este punto es toda una incógnita a día de hoy. Lo que está claro es que por el mismo precio que antes te comprabas un coche únicamente para ir por el centro de la ciudad libre de restricciones, ahora te puedes llevar un vehículo bastante más completo y polivalente que además, tiene el mismo nombre.

A favor: Estabilidad en carretera. Respuesta del motor R135. Autonomía real
En contra: Tiempo de carga doméstica. Calidad de algunos ajustes.