Hace apenas unos días Volvo nos presentaba su propuesta de futuro en forma de un innovador concept con el nombre de Volvo Concept Recharge que augura una prometedora nueva era dentro de la marca sueca en la que la electrificación, la computación y el infoentretenimiento y la seguridad van a tener un papel primordial en la compañía. Muchas de esas soluciones se aplicaban ya en el concept, pero Volvo ha querido dar más detalles sobre estos avances que prepara para los próximos años.
Una marca 100% eléctrica y sostenible en 2030
Quizás la parte más llamativa sea el compromiso de la compañía de que para 2025 la mitad de sus ventas sean ya de vehículos eléctricos para pasar a ser, como tantos otros fabricantes, una marca que solo ofrecerá vehículos eléctricos a partir de 2030.
Para llevar este objetivo a buen puerto Volvo ha confiado en el fabricante de baterías Northvolt, con el que pretende crear paquetes con una densidad de energía un 50% superior a la de las baterías actuales y también reducir los tiempos de carga para mediados de 2020. Otros detalle que conocimos hace poco con Polestar y que tampoco es poca cosa, es el compromiso de producir baterías solo con energías y materiales renovables y reciclar tanto material de baterías antiguas como sea posible. Volvo también se ha propuesto incluir en su próxima generación de vehículos la carga bidireccional que permitirá cargar otros aparatos eléctricos con nuestro coche.
Otro aspecto que no iba a quedarse sin evolucionar dentro de Volvo, al ser durante décadas una de sus señas de identidad, es el de la seguridad y aquí la firma sueca quiere seguir reduciendo accidentes con el uso de sistemas como los sensores LiDAR presente en el Concept Recharge, y que acompañarán a radares y cámaras para mejorar la capacidad de sus coches de monitorizar todo lo que lo rodea. Además Volvo quiere también, a través de los datos recogidos, realizar actualizaciones cada vez más rápidas para mejorar el nivel de conducción autónoma de sus vehículos.
Más inteligente que nunca
Volvo también ha anunciado la llegada de un nuevo sistema de computación central que estrenará el año que viene en un nuevo vehículo eléctrico. Desarrollado junto a Nvidia, este sistema cuenta con tres computadoras principales, una dedicada al procesamiento de la visión y la inteligencia artificial otra para la computación general y una tercera que se enfoca en el infoentretenimiento. Este sistema central también reducirá el número de unidades de control electrónico a bordo de cada Volvo de 100 a 50, lo que permitirá ahorrar peso y mejorar la eficiencia energética.
Este nuevo sistema central se combinará con el sistema operativo VolvoCars.OS desarrollado junto a Google, que tendrá un importante enfoque en la seguridad, ofreciendo de forma clara y sencilla solo la información más relevante para evitar distracciones al volante, por ejemplo ofreciendo los datos más importantes en el menú principal, sin necesidad de tener que entrar a otros submenús.
Como se explicaba anteriormente muchas de estas novedades se aplicarán por primera vez en el próximo SUV insignia de Volvo que se mostrará el próximo año y que podría ser el sucesor del actual XC90.
Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.
