Webber cree que es “una pérdida de tiempo” discutir sobre si ir o no a Bahréin. Para el piloto de Red Bull Racing, los pilotos deben confiar en la decisión de la FIA. Para el australiano, hay demasiadas perspectivas, opiniones y compromisos entre las escuderías, por lo que es la FIA la que debe decidir si continuar con la carrera: “Estamos depositando mucha confianza en la FIA al ir y venir a las pistas cada día, compitiendo en los circuitos y teniendo un fin de semana normal de Gran Premio”.
Mark reconoce que el tiempo se ha echado encima y ahora la decisión es compleja y puede que hasta precipitada: “Es una decisión difícil, porque estamos a una semana. Hay más presión en la toma de la decisión. Con los fondos llegados de Abu Dabi, Bahréin y Oriente Medio, [los lugareños] están emocionados con la Fórmula 1, y claramente quieren darle otra oportunidad”.
Encontrar información independiente y exhaustiva sobre la situación sociopolítica de Bahréin es muy complicado: mientras que algunas fuentes tratan de dar una imagen irreal de tranquilidad, las asociaciones a favor de los derechos humanos opinan todo lo contrario. Webber ha intentado formarse por su cuenta una opinión: “He intentado ver las noticias para tener una visión lo más independiente posible sin intoxicarme con otras informaciones. Sentado aquí, tengo tanta información como cualquier otro”.
Pero finalmente, según lo que él siente, y a pesar de que el año pasado defendió la cancelación de la carrera, esta vez quiere competir: “Si tuviera elección, querría correr. Es lo que quiero hacer. Pero tras decir esto, no se puede obviar que en el fondo hay mucha buena gente en nuestro deporte y todos ellos quieren ir sobre seguro. No queremos involucrarnos en la situación de fuera, pero la gente que apoya nuestra carrera está en el ajo, por eso es tan delicada la situación".
