Basado en el GT3 RS de calle (del que se han vendido en todo el mundo más de 2.200 unidades), el GT3 Cup Racer es el vehículo que utiliza la marca en las carreras de resistencia. El peso del GT3 Cup Racer de 2012, que no hereda la estética del próximo relevo del 911 es 170 kilogramos menor al suprimirse equipamientos y determinados materiales, como los fonoabsorbentes que rodean al motor, mientras que su motor bóxer de 3.8 litros y 450 caballos que se estira hasta las 8.500 vueltas se mantiene intacto aunque incorpora un catalizador específico que reduce las emisiones de C02. El depósito tiene una capacidad aumentada hasta los 100 litros, lo que permite una mayor autonomía en las carreras de resistencia, en las que los pit stop juegan un papel importante y en los que se deciden muchas carreras.

El Cup Racer estará a la venta en septiembre de este año desde los 161.750 euros, precio salido de fábrica y sin impuestos

Los neumáticos de carreras recaen en unos Michelin en medidas de 18 pulgadas para los dos ejes y, en opción, están los frenos cerámicos de alta resistencia a la frenada (además de tener una vida útil superior) que reducen el peso del conjunto otros 20 kilogramos. La suspensión, por su parte, tiene unas barras estabilizadoras controladas electrónicamente que pueden regularse hasta en siete posiciones diferentes en función del trazado del circuito y el estilo de conducción del piloto.

Además de la temporada próxima, este GT3 Cup Racer podrá participar también en las categorías que se disputen a lo largo de 2013 al contar ya con las especificaciones requeridas en los reglamentos de la FIA.