En el mismo salón en el que se presenta la nueva generación del 911, Porsche va a mostrar un 911 de carreras basado en la generación precedente. Esta política sería considerada descabellada en cualquier otro coche, pero el Nueveonce sigue otros criterios.

Para esta temporada el GT3 R incorporará pequeños detalles para mejorar la versión precedente, y en Frankfurt se podrá ver una unidad dotada de un motor con 20 caballos más (500 en total), levas de cambio tras el volante, transmisión reforzada, una estabilizadora delantera más blanda para reducir el subviraje y un software que evita las pasadas de vueltas por fallar una marcha. Por lo demás el coche sigue siendo idéntico a la versión precedente, correspondiente al año 2010. El motor sigue siendo un 4.0 litros -los cambios realizados para ganar potencia se centran en la admisión- y la electrónica aumenta la eficacia y facilita el pilotaje gracias a un ABS de carreras y un control de tracción también adaptado para este fin.

El Porsche 911 GT3 RS encaja a la perfección con el concepto de “Gentleman Driver”

El Porsche 911 GT3 R es el coche perfecto para quienes quieran introducirse en la competición por la puerta grande, disfrutar de un bólido muy potente e incluso presumir de una maquinaria competitiva. Eso sí, los clientes tienen que disponer de una buena cuenta corriente, pero ¿qué se puede hacer mejor que esto con 304.500 euros? Bueno, súmele impuestos, mas la infraestructura de un equipo de carreras, claro. Y para quienes ya disfruten en las pistas de un “model year” 2010, Porsche Motorsport pondrá a la venta un Kit 2012 para beneficiarse de estas mejoras a un precio de 43.100 euros, y así poder estar al nivel de los últimos en estrenar coche.