Continúa la lucha de los promotores de los Grandes Premios de Fórmula 1 para hacer que la nueva era de la competición se adapte a sus necesidades. Como hasta ahora, el principal tema de confrontación continúa siendo el sonido. Así, el promotor del GP de Australia, Ron Walker, muy crítico con los poco ruidosos motores V6 Turbo, dirige una alianza promotores de Fórmula 1, y ha convocado a una reunión antes del próxima Gran Premio.

Según el diario The Independent, en esa reunión aconsejará a los promotores decir a Bernie Ecclestone que "ya está bien. Esto no es lo que compramos".

Sin embargo, uno de los compañeros de los promotores de Walker es poco probable que se una a las quejas. Razlan Razali, el jefe del Gran Premio de Malasia en Sepang, no se encuentra entre aquellos que están denunciando el nuevo sonido, e insiste en que no es todo malo en la nueva Fórmula 1:

"Incluso los motores más silenciosos, que van en contra de lo que muchos han esperado en el deporte de motor con anterioridad, tal vez no sean del todo malos", comentó para el New Straits Times. Y añadió: "Ahora los padres deben tener menos miedo de llevar a sus hijos a las carreras con los niveles de ruido reducidos".

Razali cree que la nueva tecnología de la competición, la cual produce mayores velocidades superiores haciendo menos ruido y gastando menos combustible, es impresionante.

"Usted ve un pequeño motor capaz de producir 750 caballos de potencia y tiempos por vuelta casi tan rápidos como los hacía el V8 del año pasado, por lo que es simplemente increíble cómo la tecnología ha avanzado".

Pero las críticas parecen haber calado tan hondo que Ecclestone y el presidente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), Jean Todt, están planteándose tomar medidas para aumentar el sonido de los monoplazas: como cambiar la ubicación de los micrófonos en la pista para optimizar el sonido en las televisiones o hacer algunos ajustes en los coches para que los motores sean más ruidosos.