Si no era suficiente con la misma crisis interna, ahora, desde fuera, la Fórmula 1 es un objetivo en la mirilla de la Unión Europea que se plantea la legalidad de algunos puntos controvertidos como la adquisición reciente del 1% de los derechos del Gran Circo por parte de la FIA.

Extraño movimiento que podría estar fuera de la legalidad según la Comisión Europea. ¿Por qué? Porque dicha Comisión obligó a separar la gestión económica-comercial en este deporte, al ser incompatibles. Por aquel entonces la FIA vendió los derechos de la F1 por cien años a Delta Topco. Y ahora, sin embargo, tras varios intentos frustrados de salida a bolsa, la FIA se ha hecho con este porcentaje. Una investigación que, al contrario de lo que piensan muchos, está muy avanzada, según relata The Times. Ahora se buscan soluciones y destapar una verdad en la que podría involucrarse Max Mosley, ex presidente del organismo que dirige la F1.

"Me siento halagado por la idea de que podía estar involucrado. Estoy fuera de contacto, pero me gustaría hacer todo lo posible para ayudar a todas las partes pertinentes para lograr un acuerdo", confesó el dirigente predecesor de Jean Todt.

Disyuntiva abrupta para la F1, lo dice el corresponsal de The Times, Kevin Eason, que alerta de la complicada situación que se plantea. "Es preocupante para la F1. Parece que los funcionarios de la UE han construido un archivo durante los últimos 18 meses. Estarían obligados a poner todos los aspectos de cómo se ejecuta este deporte, bajo el microscopio, si ellos se mueven", comenta Eason.

Un reinado de Todt que vive inmerso en la espinosa realidad con la distribución injusta de los ingresos, los altos costos en la llegada de la era turbo y con los equipos pequeños en colapso y con ganas de rebeldía. Algunos como Marussia, Force India, Lotus o Sauber ya han sido invitados a realizar presentaciones legales ante la Comisión Europea. El equipo de Todt se reunió, en Ginebra, la semana pasada, sin encontrar un remedio para las cuestiones planteadas. Aún restan las palabras de los jefes de equipo.

La Comisión Europea analizará la posible violación de la F1 del acuerdo de competencia