Las fotografías que nos enviaron nuestros espías hace unos meses de la próxima generación del Range Rover sugerían que la marca británica iba a mantener las proporciones del modelo actual, por lo que rondará los 5 metros de longitud y su batalla estará muy próxima a los 3 metros. Con estas cotas cualquiera pensaría que estamos ante un vehículo lo suficientemente grande para la mayoría de clientes, pero siempre hay alguien inconformista que busca algo más. Para todos ellos, Land Rover ya prepara una versión de batalla extendida.
Más espacio en las plazas traseras
La mejor prueba de ello la tenemos con las recientes imágenes que nos han enviado nuestros espías, apostados en las carreteras alemanas junto al trazado de Nürburgring. Allí han cazado a un ejemplar extensamente camuflado que se corresponde con la nueva generación del popular 4x4 británico y, más concretamente, con la variante LWB, es decir, aquella que presume de una distancia entre ejes ampliada. Tanto esta alternativa como el modelo estándar estarán basados en la nueva plataforma MLA del fabricante inglés, construida en aluminio para conseguir rebajas notablemente el peso del conjunto.
Al igual que en las imágenes a las que hacíamos referencia al comienzo, los diseñadores de Land Rover no realizarán cambios drásticos en el vehículo ya que la carrocería de este ejemplar conserva la clásica silueta de los Range Rover anteriores. No obstante, el 4x4 británico presumirá de unos grupos ópticos más estilizados y unos paragolpes más redondeados en comparación con la generación actual. Con respecto al interior, esta versión LWB contará con una mayor amplitud en las plazas traseras y un plus de comodidad que sabrán apreciar los clientes de la compañía.
¿Con un bloque BMW?
La nueva plataforma también permite que el Range Rover de próxima generación admita una amplia gama de propulsores. Los cuatro tubos de escape de esta unidad en cuestión nos hacen creer que debajo del capó se encuentra un motor de ocho cilindros, pero no el habitual bloque sobrealimentado, sino una unidad biturbo de 4.4 litros procedente de BMW. El resto de opciones estarán formadas por motores diésel y gasolina con electrificación a 48 voltios, un híbrido enchufable e incluso una variante completamente eléctrica.
Se espera que la próxima generación del Range Rover vea la luz en la segunda mitad del 2021, con las primeras unidades aterrizando en los concesionarios antes de que acabe el año. Habrá que esperar unos meses más para conocer a esta variante de batalla extendida.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
