En el Reino Unido existen muchas compañías dedicadas a la personalización de automóviles y una de ellas destaca por sus proyectos off-road basados en productos de Land Rover. Nos referimos a Bowler, una entidad que a finales del 2019 fue absorbida por la propia JLR con el objetivo de integrarla dentro del conglomerado de la corporación y así poder trabajar junto a su división SVO. Pues bien, ya conocemos el primer proyecto: el CSP 575.
Con más de 500 CV
Dado que Bowler ya tiene toda la libertad para poder trabajar con el Defender original, el preparador británico ha unido sus fuerzas con SVO y el resultado es un 4x4 de lo más salvaje que ya se está cociendo a fuego lento y que pretende salir al mercado el próximo año. Se trata de una variante extrema del Land Rover Defender 110 de primera generación, el cual se fabricará en la sede que tiene el preparador en Derbyshire, en lugar de utilizar alguna de las instalaciones de Jaguar Land Rover.
Si bien lo más destacado de este proyecto se esconde debajo de la carrocería, el todoterreno británico también lucirá alguna que otra modificación estética relevante, como un capó con entradas de aire de grandes proporciones, unos pasos de rueda muy ensanchados y unas llantas específicas, entre otras cosas. El CSP 575 combina la silueta original del Defender 110 con un chasis de acero de alta resistencia desarrollado por Bowler, mientras que el encargado de impulsar al vehículo será un V8 sobrealimentado procedente de JLR.
Hablamos del mismo propulsor que da vida a los Range Rover Sport y Jaguar F-Type más salvajes, es decir, los SVR, por lo que cubica 5.0 litros de cilindrada y es capaz de desarrollar 575 caballos de potencia, con un par máximo de 700 Nm. No sabemos que transmisión llevará este Defender tan especial, pero los citados modelos utilizan una caja de cambios automática de ocho velocidades por convertidor de par que envía toda la energía a las cuatro ruedas.
Producción limitada
Los responsables del proyecto han comentado que el CSP 575 será totalmente legal para circular por la vía pública, contará con cuatro asientos, una jaula antivuelco y un sistema de aire acondicionado. Su producción estará muy limitada ya que los planes iniciales de Bowler son ofrecer el modelo “en cantidades muy pequeñas”, con un precio de salido de unas 200.000 libras, es decir, 222.000 euros al cambio.
En palabras del jefe de la división SVO de JLR, Michael van der Sande: “Bowler es todavía una entidad independiente con sus propias oficinas, su propio personal, sus propias reglas, su propio balance y tenemos la intención de hacerlo funcionar de esa manera. El mandato de Callum es en gran medida dirigir Bowler como una empresa independiente, pero con el apoyo de Land Rover cuando sea apropiado. Y eso es lo que estamos haciendo aquí”.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
